BAJAS ADICIONALES… (GUERRAS NAPOLEÓNICAS-CIEN DÍAS)


Los científicos Dr. Ludvig Reithard y la Dra. Samantha Tedeschi
habían programado su viaje en forma minuciosa y con gran ansiedad.
Nada los había tenido más atentos que su proyecto.

Después de múltiples pruebas infructuosas, en los
últimos años, ellos serían los pasajeros.

Una vez en la nave se dispusieron a partir en medio de una absoluta
incertidumbre.

Primero todo fue muy rápido, colorido y vibrante para luego caer en
la más absoluta oscuridad…
Entonces…todo se hizo más lento…Primero divisaron un cielo
estrellado, luego una intensa luz a la que se dirigían hasta quedar
a la vista un campo inmenso en dónde llovía
torrencialmente…Vieron soldados por todas partes, entonces supieron que
habían llegado.

Aterrizaron muy lentamente y en forma muy silenciosa . Nadie se
percató ya que la nave quedó escondida en una arboleda.
Miraron sus relojes, eran las 11:30 AM del 17 de junio de 1815. Sin lugar a
dudas tenían tiempo pero debían encontrar primero y luego
convencer al Emperador Napoleón Bonaparte de cambiar la estrategia
en la batalla para así lograr vencer a las tropas aliadas comandadas
por el Duque de Wellington.
Ellos lograrían cambiar el curso de la historia y no
permitirían que se restaurara la corona de Luis XVIII, logrando
Bonaparte invadir Los Países Bajos.
Cuando se disponían a correr por el campo de batalla un oficial los
detiene y los lleva- un tanto azorado por las increíbles vestimentas
y por un acento jamás escuchado- frente al Emperador que se
encontraba en el sector de la Reserva muy cercano a la ciudad de Waterloo.

-¿Quiénes son Uds.? Preguntó Napoleón.

- Señor Emperador, somos científicos, la señora es la
Dra. Tedeschi y yo el Dr. Riethard. Debe escucharnos… No debe atacar la
granja de Hougoumont. Debe dirigirse al centro y por el ala izquierda.
Así logrará ganar la batalla.

-¿Cómo han llegado a aquí?

- En una nave que viaja en el tiempo…Señor- Bonaparte lanzó
primero con una carcajada estrepitosa y luego frunciendo el seño y
con voz grave preguntó:

-¿Dónde se encuentra esa nave?

-Detrás de la arboleda, señor, tiene un sistema que la hace
invisible…

-Basta!!! Enciérrenlos!!!! - Gritó el Emperador.

Los oficiales se los llevaron a una tienda de campaña donde fueron
dejados como prisioneros y por más que quisieron convencer a todos
con los que hablaban, nadie los escuchó.

La batalla siguió su curso, Napoleón con sus órdenes
ambiguas e inseguras ordenó marchar a la derecha hacia la granja. La
infantería y la caballería avanzaba por un barro que
dificultaba su marcha.

El 18 de junio de 1815 el ejército francés es derrotado, con
más de 40.000 bajas, entre ellos dos extraños que se
habían presentado en el campo de batalla el día previo.


Hoy en el año 3002 a un año se la desaparición de los
científicos es descubierta en su laboratorio una placa:

“En memoria de los doctores Tedeschi y Reithard: héroes de la
ciencia que murieron por algo que hasta ahora ha sido imposible: VIAJAR EN
EL TIEMPO”…