Se hace notar ahora
el sonido de una campana.
Y su agitación sonora
quiebra la soledad de la mañana.
Encierran misterios sus sonidos.
Suenan como tristes bramidos
y sé que por ti toca esa campana.
Noto que ese metal canta
melodías como una elegía
al evocar tus ansias desiertas.
Se derraman con alas abiertas
hacia la nada, Como en otra vida
de amor y deseos de un alma transida.
Texto agregado el 26-05-2010, y leído por 235
visitantes. (6 votos)
Lectores Opinan
26-05-2010
Es maravilloso haber llegado a tu poema.Es disfrutar de imágenes vivas ante nuestros ojos********
Un abrazo
Victoria 6236013