Indolente
¡Indolente!
Nunca podrás imaginar el tiempo que he esperado…
Ni podrás siquiera sentir mis susurros ahogados,
Indolente, sí.
Frente a la intemperancia del hambre de mi pasión,
Cuando esta respiraba el aliento de los frutos delicados que tuve de tu querer mentiroso.
¡Impávido!,
Te mantuviste impávido a mi muerte descarnada,
Verdadera ruptura de silencios,
Vacios y Corruptos por tu boca que enveneno mi alma
Con un beso,
Seguí a la espera amarga de que no me abandones,
Suplicándote Torcida y loca,
Me quede frente a ti,
Mirando desbocada Cómo tu callada quietud,
No encontró el valor…
¿Por que no pudiste matarme de una vez y en forma definitiva?
¡¡Cobarde!!
Cuantos habrán como tu,
Dispuestos a rasgar de cuajo el corazón de quien los ama
Haciendo de este un festín de egos y risas,
En el deleite implacable de un ser sin alma
¡Indolente!
Me desangra tu burla y la indiferencia
Con que arrojaste a mi cara tu negligencia mortífera.
¡¡ Maldito!!...
Solo me has usado para darme de estocadas,
Para tomarme y lanzarme,
Desde los lagos mudos de tu aliento,
Me pusiste en una jaula de tinieblas,
Custodiando los recuerdos prohibidos de olvidar
Como en una especie de purgatorio,
Me anclaste a tu esencia exprimiendo la mía,
Ahí….
Donde nadie puede verme,
Sin importar que esto me transforme en tu fantasma de amor,
Un amor castigado oculto,
Delegado a la tarea constante de olvidarte,
Cociste mi boca y me ataste tus pasos,
Cavaste para mí una tumba de piedras grises,
Indolente,
Un maldito indolente
Tomaste mi nombre para quemarlo y no recordarlo…
Pero aun así te digo,
Malvado indolente
Que tu también estas condenado,
Porque en mis pisadas te llevo trabado,
Como un pequeño trozo de vida,
Que morirá a mi lado,
Sí,…
Te lo robe mientras dormías para que nunca seas libre,
Y mi condena fatídica no sea solo mía…
Alexandra E.S.I
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