Quise vivir, sin darme cuenta que mientras lo intentaba sólo me acercaba a la muerte, Quise soñar pero dormía en una cama de vidrios, echada a mi suerte. Jalé mis labios horizontalmente tratando de imitar eso que llaman felicidad. Dejaron de luchar y débilmente se dejaron caer en la oscuridad. La función ha terminado el telón han dejado caer las personas se han retirado y ninguna me ha visto desfallecer
Texto agregado el 21-05-2010, y leído por 123 visitantes. (1 voto)