¡¡¡QUÉ HERMOSO!!!


Apareciste un día
como un hálito de luz en mi vida.

Caminaste en la punta de los pies, sigilosamente a mi lado
receloso, altanero y orgulloso.

Impertérrito ante lo mágico
de un cariño verdadero y majestuoso.

Escondiste tu sentir
solamente por temor a lo increíble.

Antifaz de terciopelo
disfrazó tu corazón sensible y verdadero.

Despertar de tu vanidad extraordinaria
parte mía ya lo es aunque lo niegues.

Nos dejamos perseguir por la lujuria
la pasión y la locura.

Nos queremos sin saber a ciencia cierta
cómo actuar para agradarnos y creernos.

Procuramos parecer témpanos de hielo
cuando en realidad somos el calor abrazador.

Sin medir las consecuencias, me alejé verdaderamente aterrada
para no sentir tu desprecio e ironía.

Apoyaste la moción del escapar
aseverando mi certera decisión.

Confundiste a este ser
con un simple y mágico ente sin sentir.

Arrancaste de tus propios sentimientos
aseverando nunca más ser atrapado.

Hoy hablaste de sueños y encanto
de poner los pies sobre la tierra.

¿Sientes eso muy honesto de tu parte?
¿O quisieras que ello renaciera?

Se que sientes y padeces
en momentos de inquietante soledad.

Descubrí la magia de tu ser
sin querer un día cualquiera.

A través de inteligentes y suspicaces respuestas
aprendí que eres bello.

Prioritario en tí es ser perfecto
y esto escapa a tu esquema establecido.

Te has cruzado en el camino
de esta pobre e infeliz mujer.

No sabrás lo que has perdido
no sabré lo que he dejado.

Te sentí, te palpé, te besé en mis sueños,
me envolviste con tu manto arrullador.

Serás mi amigo aunque no quieras
seré tu amiga aunque no quiera.

La vida es una farsa
retocada de bellas ilusiones.

La pantalla atrapa almas
con magnetismo silencioso.

Reconforta el que estés día a día
escondido tras de ella.

Si me quieres estarás ahí
aunque solo sea para compartir tonteras.

Bastará que digas ¡¡¡holaaaaa!!!
y habrás brindado estrellas luminosas

(Áída Laura)