Ellos no saben nunca dónde mirar ni qué. Se acostumbran. Les dicen... Este camino es ancho... Y van. Sin preguntar. Por donde pasa el amo de látigos y horas.
La libertad... Ellos la desconocen. Viven solos y a oscuras. Con las manos cogidas hasta el pie. Y en los ojos vendas de cigarrillos que no les dejan ver...
No llegan nunca a levantar la mano. Bajan las cabezas. Y resignadamente avanzan en sus vidas que otros les han comprado.
Hasta cuando la nación saldrá a delante, hasta cuando veré una nación libre, una nación capaz de valerse por sí sola, una nación en la que se aproveche toda la capacidad de producción que tiene en sus tierras, aguas e industria.
Hasta cuando, hasta cuándo tendremos un país libre, libre de consumismo, libre de explotación salarial y campesina, hasta cuando se cumplirá el sueño de aquellos grandes hombres que solo soñaron con libertad, cuando se cumplirán las promesas de aquellos que dieron sus vidas por la libertad de un México independiente.
Son solo palabras la libertad y la justicia. Justicia ¿dónde está la justicia? Justicia en manos de aquellos que tienen el poder y el dinero de la nación. Cuando la nación Mexicana tendrá verdadera libertad, libertad que no sólo quede en el sueño de aquellos idealistas.
Libertad es solo una simple palabra que no tiene mayor valor por si sola sin la Práctica, hasta cuando dejaremos de pensar y actuar si nada nos importara. Hasta cuando reclamaremos nuestra libertad adquirida desde hace200 años esa libertad que se ha perdido, libertad que nos han robado los poderosos imponiendo y trabajos pesados a bajo salario. No entiendo cómo es que nos hemos dejado quitar nuestra libertad luchemos hoy por la libertad que nos han robado.
El deseo más grande de cada hombre es la libertad, de esa libertad en donde nuestras decisiones cuentan no donde solo nos hacen ver que nosotros somos quien elegimos y nuestras decisiones no son tomadas en cuenta. Hoy es el día perfecto para luchar por esa libertad que nos han robado, hoy exigimos libertad y justicia. Reclamamos nuestro derecho a la libertad, ese derecho que nos han quitado porque es el valor más grande.
Yo he gritado: ¡VIVA LA LIBERTAD! en plena calle desafiando a los poderosos armados. Pero palidezco cuando pasó por tu casa y tú sola mirada me hace temblar.
Hoy es el sueño más grande que un día todos podamos decir “hoy soy libre al fin y gritar con voz fuerte VIVA LA LIBERTAD.”