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Capitulo (cualquiera)

“El vehiculo de las estrellas se
ha desbocado entre nosotros..”




“Estos dias he estado escribiendo a H** porque me lo dijo T** pero en realidad creo que esas cartas no iban dirigidas, desde dentro de mi, para el… Es un poco absurdo querer a alguien pero escribir como si quisieras a otra persona..”

“Hoy es uno de esos dias en los por el ruido no sabes si esta lloviendo o hace mucho viento. Todavia no lo he comprobado pero creo que hace viento. Se oye cantar a los pajaros. Y aunque parezca mentira, ¡acabo de oir por primera vez a un caballo relinchar!”

“No me atrevo a decirselo. Dice Lichtenberg que daria parte de su vida con tal de saber la temperatura promedio del paraiso. Yo seria feliz con pasar una tarde mas a su lado.”

“Hace ya dias -si no millones de años- que no se nada de el. Esos dias, o mejor dicho, esos momentos en los que le veo, son imposibles. No se que me esta haciendo.”

“Eso de que los enamorados tienen mariposas en el estomago es la manera de decir que tienen hambre. La feliz forma de sentir una necesidad y liberarse de ella.”

“¿Cómo puede una pluma escribir de amor?¿Cómo puede una palabra pronunciarse “amor”?.”

“Esta felicidad me desgarra. Como si me alejara unos centimetros de mi misma para que me persiga. Es mas parecida a una cancion que a una emocion.”

“Si por cada pensamiento que tuviese de H** me dieran una moneda, conseguiria acabar con mucha hambre en el mundo. Despues podria decirle: “Si, todo esto lo has hecho tu”.”

“A veces me resigno y pido justicia en la balanza que tengo de amor-sufrimiento. Pero. que es justo cuando al cortar una flor por cualquier parte de su tallo acaba muriendo y sin embargo, cortandonos a nosotros las piernas todavía podemos continuar.”

“Esta mañana he acompañado a mi padre a ir a misa. Nos encontrabamos en un banco y cuando todo el mundo hacia ya un rato que se mantenia arrodillado, empecé a oir unos suaves golpecitos con la suela del zapato. Recuerdo haberme emocionado y creo que si habia fe en algun lugar de toda la iglesia, juraria que se encontraba bajo ese taconeo.”

“Mi mayor problema es que no se perder la esperanza. Pienso en H** y en que todavía hay un camino o sendero que no veo.”

“El corazón es con lo que luchamos para no enamorarnos una vez que ya no podemos hacer nada.”

“...de esas bocanadas que te llenan los pulmones de algo mas que de aire y te levantan el bello de los brazos para hacértelo saber. Que te obligan a aguantar la respiración un rato intentando impedir que salga lo que sea que acabas de conseguir atrapar, que no se vaya tan rápido como acaba de entrar, que se quede dentro un buen instante hasta ver si eres capaz de cansarte de ese placer que te repasa el cuerpo como una onda de emoción con vida propia. En esos momentos creo que el mundo esta en paz. Solo soy yo quien lo siente pero me engaña. Me engaña ese sentimiento de belleza como nadie lo puede hacer, me obliga a creer que existe un final para mi.”

“Solo vemos el arco iris cuando no nos da a nosotros encima. Pero cuando lo miramos de lejos, siempre creemos que sus extremos unen algo hermoso.”

“Me gustaría recordar los momentos que no he tenido con el. Hasta el mas mínimo detalle que no estuvimos juntos recordar y finalmente decir: “Ves, ¿ves como te quería?.”

Al margen había un pequeño poema:
“La luz de los cielos no ilumina/ solo cuando el amor acompaña/ la luz del teatro es realmente vida”.

Y una anotación debajo:
“Todo el mundo se merece que le digan que se va a morir. Aunque no sea verdad.”

“Estar enamorado es vivir mas de lo acordado. Saltarse las reglas que los Dioses nos habían establecido para llegar.”

“Convivo con las personas como lo hacen las flores amarillas junto a las rojas: “Sin saber el color de las de al lado”. Por eso H** es un sustento para el alma. Lo entiendo tan bien que a veces me convenzo de que después de el, nunca dejare que nada me cambie.”

“¿Qué distancias son esas que hacen ver a Dios en el Sol por su lejanía pero provocan una sonrisa noches despejadas de nubes.”

“Hay un momento en el que la fuerza se convierte en corte. Un momento en el que ya no posee nada de si misma y lo pierde todo. El mismo que sostiene una viga de hierro ochenta pies e inesperadamente el cable de acero se rompe. Ese momento en el que antes de que finalmente se detenga, impacta contra la gravilla del suelo y lo atraviesa del impacto. Así, se rompen corazones.”

Y al margen:
“..esta tarde H** no ha venido.”


Al terminar de leer las que le resultaron mas cercanas a el, todo a su alrededor, como si se hubiera transformado en una isla sin saberlo, se había quedado a oscuras.
Nirvana se apoyo en una de las estanterías que hacían esquina cuando termino de apagar las luces delanteras de la librería. Le cubría parte de la cara una débil penumbra que rápidamente quedo en un siniestro encanto. Comenzó a morderse suavemente las uñas y mantuvo clavados sus ojos. Le observaba en silencio. Como un secreto inocente con el que cualquiera que hubiese cogido una silla podría haberlo contemplado.
Muchos hubieran pagado por ver ese momento sincero en el teatro. Por ese delicioso escenario, ¡incluso Henry hubiera consentido quedarse en la ultima butaca!.
Permaneció con el dedo en la boca y, con cierta timidez en el rostro, empezó a imitar sus movimientos. Si Henry se revolvía en el asiento, ella se acomodaba despacio y sin poder controlarse, le complementaba a oscuras. Si Henry se inclinaba para ver mejor el cuaderno, todo su cuerpo lo acompañaba hasta que retrocediera nuevamente con el de el. Cuando Henry paso la hoja, ella, igual que si la respiración hubiera elevado su cara por un leve susto, dio un ligero respingo y rápidamente intento recuperar la atención. Por un minuto creyó que si Henry decidida levantar la mano, ella haría lo mismo y acabaría tirando algún libro. Con tantos brincos y bailes, agoto sus posturas y vacilo varias veces en si debía hacer algo para no ser delatada por cualquier brusco movimiento.
Tomo el primer libro de la esquina y se enfilo pausadamente hasta que consiguiera quedarse rezagada tras el. Aproximándose sin hacer ruido y recorriendo serenamente los pasos, sintió todos los centímetros de la suela que iba recorriendo a la vez. Como vio que esta era la mejor forma de avanzar, considero también oportuno que el trayecto desde que levantaba un pie hasta que llegaba el inicio del siguiente paso fuese igual de lento. A final, se ralentizaron tanto sus aires que creo una maravillosa situación de terminado movimiento.
Miro al mismo tiempo a Henry e imagino que el también lo estaba sufriendo. Poso encima de la mesa una hoja de entre el diario y hasta que no respiro de nuevo, Nirvana no sintió que se aposentara del todo.
Henry comenzó a dar media vuelta para acomodarse en el sofá y en uno de esos descontrolados aspavientos, la vio.
Se mantenía inmóvil. E hizo todo lo que pudo por mantener el mismo mirar.
La expresión de el tampoco resalto ninguna nueva emocion.
Solamente la miraba.
Sin saber muy bien lo que ocurría, pensó que saludar a alguien a quien conocía tan bien hubiera sido maleducado y, con asombrosa presteza, reeduco sus sentidos haciendo de todo esto una situación de lo mas normal.
Mantuvieron el silencio mientras fueran mas conscientes de la existencia del otro que de la propia. Henry recordó varias tardes junto a ella y como en uno de esos arriesgados juegos a los que el llamaba “vida”, había perdido la oportunidad de saber su nombre.
Nirvana parpadeo un par de veces como si sus pestañas fueran una bandada de pájaros y rehúyo la mirada hacia el suelo. Había salido de la penumbra y ahora sus mejillas tenían un relumbrar dorado. Era el maquillaje, que nunca nadie le había enseñado a ponérselo y al repasarlo varias veces, creaba una doble capa de reflejos.
Dejo caer levemente su mandíbula sin olvidar el nervioso ajetreo del libro entre sus manos. Pronto, ese vibrar se traslado a todo el cuerpo y a Henry le hizo gracia pensar que su tiritar estuviera intentando decidir el tipo de versos con el que se expresaría su verdadera princesa.

Texto agregado el 06-05-2010, y leído por 93 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
06-05-2010 Yo no entendí nada. logan5
06-05-2010 Es un texto imposible, lleno de fuerza y vitalidad. Si la literatura sirve para algo, eso es para jodernos la vida. Una historia de amor como deben ser todas las historias: inutiles. pekejimenez
 
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