Dicen hoy las impúdicas encuestas
que el gobierno del paisa traficante
debe de continuar con su brillante
programa de robar hasta en las fiestas.

Llevan los locombia(s)nos hoy a cuestas
el hambre y el terror; estos farsantes
lanzan vivas, cual necios coribantes,
al que manda a morir con botas puestas.

Esto de los gobiernos terroristas
debe parar, abriendo las conquistas
de las masas estúpidas y lerdas.

Ya cesará el festín de los más vivos
cuando los pueblos limpien, reactivos,
del gobierno los chancros y los mierdas.