Durante todo el año me mentí a mi mismo con la tristeza, conviví con el sufrimiento y el dolor me siguió como mi sombra. Lo unico que me quedaba era mi madre, quien pagaba para un estudio mejor, sin embargo para mí ella estaba pagando para un sufrimiento peor. En ese momento pensaba en que si la vida es dura y sufrible, la muerte sería suave y disfrutable. Una adolescencia es horrorosa para mí, el cambio es deprimente y mi futuro será el fin. Nose que será de mí, ahora mi vida es lamentable, un amigo o una amiguita, lo unico que necesito para disfrutar. Seguro esa amistad está y se vé a lo lejos, aunque mis vacíos ojos no alcancen para eso, abandonados y deprimentes pensamientos...supongo. Una vida tan triste, fría y rápida como el río, eso es lo que pienso, ojalá hubiese escuchado a mi madre con más razón, Las puertas se cerraron en marzo, ninguno hizo por entrar y ya perdieron esa oportunidad, la llave no abre mi vida hasta el próximo año, es oscuro y desolado, mis ojos no ven más que personas desconocidas, como cuando comenzó el año.