Tu soledad y mi tristeza se saludaron esa noche. Tú llevabas lo tuyo oculto por unas copas y yo, escondía en una sonrisa mi desdicha. Pese a las copas y la risa, tu soledad y mi tristeza se tomaron de la mano.
Texto agregado el 16-04-2010, y leído por 199 visitantes. (0 votos)