PROCESIÓN DE MADRUGADA
(noche de Jueves Santo)
Calle Meléndez, y en la madrugada,
El Cristo del Amor, procesionado,
Se acerca, con la cara desmayada,
Y en sus ojos, un llanto desolado…
Mira su cruz, mi alma atormentada
Y le pido perdón, por mi pecado,
Por mi vida infeliz, descarriada,
A pesar de lo mucho que Él me ha amado…
Túnicas blancas, en sus costaleros
Y rapaces, al son de las matracas,
Descalzos, de su frío prisioneros…
No ha lugar a saetas ni alharacas…,
Corazones dolientes y sinceros,
Que, para otros festejos, sean las tracas…
En el largo silencio, los clarines,
Lloran por el Señor de serafines…
EMILIOSALAMANCA
(escrito en la noche del 1º de Abril,
mientras el Cristo se acercaba)
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