Vivian Juntos en un conservatorio de música un Acordeón y un Violín, a pesar de sus diferencias eran los mejores amigos! Vivian ya cerca de tres años, se conocían como hermanos…. Tocaban para pasar el tiempo, a pesar de los contrastes que existían musicalmente entre ellos lograban interpretar bellas melodías; todo concurría con mucha normalidad y pasaban agradablemente el tiempo en aquel conservatorio, hasta que un día de verano llego una pequeña flauta traversa, era preciosa tenia sus llaves plateadas y brillantes su cuerpo era delgado y de un niquel encantador
Los dos instrumentos se emocionaron por la llegada de la nueva amiguita, primero se presentaron y empezaron a conversar… con el paso del tiempo la flautita empezó a volverse muy cercana al Violín y al Acordeón, pero cierto día los dos amigos empezaron a sentir algo muy especial por la flauta, algo que nunca habían sentido, no sabían por que pero creían que uno de ellos debía ganarse el amor de la pequeña traversa… es por este motivo que un día los amigos riñeron tanto y acordaron que quien ganara la simpatía y cariño de la flautita seria el mejor instrumento…
El Violín, engreído como era, se sentía de antemano privilegiado con el reconocimiento de la flautita, contaba con la exquisitez de su madera, la dulzura de sus sonidos y lo afinado de sus melodías para lanzarse a la conquista, el acordeón por su parte pensaba que lo sentido y popular de su interpretación sin duda conmovería a la flauta
El Violín empezó a tocar, tocaba tan hermoso y tan elegantemente que la flautita se sintió muy engalanada… luego el acordeón no se quedo atrás y empezó a tocar tangos y cumbias, cumbias y boleros, boleros y pasodobles logrando que la pretendida le entregara algunas palabras de aliento. La competencia estaba marcada, los amigos se enfrentaban tanto y tan seguido que las mejores melodías se escuchaban tan seguido que hasta perdieron sus encantos
Los días pasaron de esta manera y la flauta ya no se interesaba siquiera por ninguno de estos instrumentos a los que tan locamente tenia compitiendo, ahora solamente gozaba con el hecho de sentirse la manzana de la discordia entre los que antes habían sido dos buenos amigos…
Desde un antiguo mueble observaba todo esto en silencio una vieja batuta…. Una noche cuando los antiguos amigos se disponían a deleitar los oídos de la flauta con el fin de ganar su corazón, la batuta los llamo y con una voz entrecortada y envejecida les dijo
“los metales no tienen calor, no tienen vida,… no tienen corazón”
Yo lo se por las largas jornadas que viví dirigiendo una orquesta, a diferencia de ustedes que están hechos de madera y cuero, las melodías de los metales son frías y no tienen sentimiento.
Dándose cuenta del error cometido los amigos comenzaron a tocar juntos otra vez y otra vez la música era feliz, dulce y relajada y su amistad se volvió mas fuerte que nunca, reían, tocaban y jugaban, jugaban tocaban y reían mientras tanto La flautita quedo tirada en un rincón oxidándose llenándose de polvo y muriendo en el olvido
FIN |