En un pequeño charco vivía una pequeña gótica de agua. Mily era una gótica muy amigable. Le gustaba jugar y ayudar a los pequeños animales, y a las flores del jardín, y quería mucho a Margarita y a Rosita porque en cada cada mañana abrían sus pétalos para dar vida al jardín.
Pero a Mily le gustaba visitar a sus amigas Karla y Luisa que vivían en una nube cerca del cielo. Pero hace muchísimo tiempo que no las veía, se le hacía difícil visitarlas porque el antipático sol no dejaba le impedía llegar hasta la nube donde se encontraban sus amigas.
Un buen día…………….
- Que día tan bello- dijo bostezando mily. Tengo tiempo que no voy a visitar a Karla y a Luisa, y yo las extraño tanto. Me aburro tanto en este charco con estos insectos-
Y entonces a Mily se le ocurrió una idea genial. Iba a esquivar al odioso sol para ver si podía visitar a sus amigas pero no sabía cómo. Y entonces vio un inmenso árbol. En la última rama del árbol, las hojas no estaban tan secas, así que decidió dar un gran brinco para llegar allá.
- ¿Para dónde se supones que vas? - le dijo con antipatía el sol
- Voy a visitar a mis amigas. No seas tan antipático. Gracias a tus rayos, mis amigas las flores se están secando.
- Yo no tengo la culpa. No quiere llover. Seguro que tus amigas están flojeando y no quieren caer – le dijo gruñendo el sol
- Claro, son tus estúpidos rayos que secan todo. Dentro de poco me voy a quedar sin casa.
El hecho es que no había llovido y ya el jardín se estaba secando. Karla y luisa oyeron la conversación de Mily con el sol, y decidieron hacer algo.
-Amigas, nosotros somos muchas. Vamos a unirnos y convertirnos en una gota supergigante, y así Mily se pondrá contenta y las pobres flores también- dijo Karla
-¡Si, si!_ dijeron todas a coro
Y entonces…se juntaron y formaron una gota inmensa, y sin que el sol se diese cuenta empezó a llover
Mily estaba muy contenta porque sus amigas venían a visitarla, bueno, y el sol se tuvo que conformar con la presencia de la lluvia. Y se alejó un poco de la nube que estaba más oscura que un chocolate. Y lo mejor de todo es que en la huída del sol al tropezarse con la lluvia se formó un lindo Arcoíris.
Mily estaba muy contenta.
-Saben, hoy es un día especial. Tenemos que celebrar que ha llovido. -dijo Mily alegremente
- si………………. ¿porque?- dijo extrañada Luisa.
Hoy va ser nuestro cumpleaños. El día del agua. Y nosotros somos muy importantes- dijo explicando Mily
¡De verdad….! dijo la despistada de Karla.
-¡Claro,tonta! sin nosotras, nadie puede vivir- le explicó Mily
Y desde ese día las pequeñas góticas celebraron ese día en grande. Por eso es muy importante el agua, y hay que dar gracias a Dios de que todavía hay un poquito, y no debemos gastarla ya que dependemos de ella. Y colorín colorado, esta historia ha terminado.
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