Con sus gastadas hojas manchadas;
Hay esta ese árbol remojado con esa regada
Que lo ha resfriado y lo ha agotado.
El que con dolores se queja de viejo que esta.

El con las hojas voto en otoño,
Y que en verano las lucio
Pero al envejecer entendió
Que cada cosa tiene su límite y muerte.

Nunca quiso terminar de brillar,
Por que ya al otro día
Despertaba cos hojas casi ya muertas.
Pobre árbol cada vez ya no podía hablar.

Y cada vez que yo lo veía tan solitario,
Lo cojía y le contaba un cuento.
Sentía su respiración parecida a la mía,
Y un día trate de sentir su corazón.

Si un día lo sentí
Después ya no lo podía sentir.
Por que se sentía muy cansado,
Aunque igual se sabía que respiraba.

Hasta que pudo descansar,
Yo no entiendo por que los otoños
En las noches de tristeza
Brilla en ceniza.