Por fin logro escuchar ese murmullo salir de mis labios
Ya es hora de que mis pequeñas palabras logren alcanzar el tono más agudo
que los pájaros puedan cantar.

Mi voz ya no es un grito al viento, sin destino o propósito,
es una queja llevada por la brisa
Tocando el cielo sucio de esta capital infernal,
llegando a las aguas del sur,
ese sur olvidado.

Sin embargo no puedo cambiar al pasado,
mi voz perdería su fuerza tratando de derribar los muros
esos muros.

¿Por que nos detenemos a mirar hacia atrás?
Nuestra historia no es digna de orgullo,
Sin embargo cada vez que hablamos de Chile se nos infla el pecho
Llenándose así con un aire aun más impuro, sucio y fatal
Igual de irremediable que nuestro pasado
Nuestras raíces.

Mi voz, dándose vuelta,
sin más remedio, hacia esta sociedad
Sociedad tocada por las garras de ese pasado
Pasado marginal, presente marginal.
¿Futuro marginal?

No, mi voz no puedo alterar lo que ya ha nacido
Pero tengo el poder de cambiar lo que va nacer
El futuro, está en mi voz y en la tuya.

Dilata tus oídos,
escuchando mi voz
agudiza tus ojos,
dándote cuando de lo que hay a tu alrededor
habla con tus manos como si estas hablaran por ti
toca tus palabras
alza tu voz.