La calidez de la amistad
matizada
de rojo sempiterno
cual sangre de hermanos.
Cuando la noche
arriva
francófonos arpegios
entrega;
indómito leit motiv.
Curda,
exordio estridente
del devenir
nocturno.
Inefable envión
por las gotas
del licor
y la hermandad
elucida
discurriendo con parsimonia
el preámbulo
de la peroración
a la copa del tinto
al decirte
¡Carpe diem! hermano
¡Salud!.
Alejandrornelas
Texto agregado el 07-03-2010, y leído por 410
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