Hoy, cuando la tierra tiembla, es inevitable soltar las lágrimas
lágrimas de miedo, de soledad, lágrimas de desepción e incertidumbre.
Hoy la vida es más dura que hace miles de situaciones antes
hoy la vida duele más que antes
hoy el cielo no se despeja más hasta llegar a tu mirada
la luna se eclipsa en tu ausencia que es tan dulce como la presencia indeseable
de la locura terrenal.
Lo blecándito y lo rilificundro se confunden con squonk y rigoletto,
la lucha es intensa, la lucha no es real, la lucha se parece a lo ideal
la figura del cuerpo delgado bajo la luna blanca y llena
se hace indispensable en el manto de estrellas solitarias del firmamento
que vibra en cuanto te oye.
La inestabilidad es lo tuyo, y no puedo negar que sea también lo mio
pues yo soy tuya.
Texto agregado el 05-03-2010, y leído por 121
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