Eres blanca enredadera que trepa con brío en un corazón de negra roca. Eres agua de río fresca y revoltosa, arremolinada en infinito al sur de la mirada. Eres el racimo de luz que emblanquece la sombra. Eres el eterno caminar y la perpetua derrota. Eres el sitio donde buscar el trozo que faltaba de mi alma rota.
Texto agregado el 05-03-2010, y leído por 460 visitantes. (12 votos)