Desconcertado respiro profundamente y se lanzo hacia el vacío, desesperadamente ella corrió buscando una solución, el llanto mojaba su rostro, los gritos del mas allá permanecían intactos. Una sombra débil se esconde en la oscuridad, la hostiga hasta quebrar.
En la penumbra es asechada por presencias malignas, corre sin parar hacia ningún lugar su aliento se congelo en el tiempo y espacio, dejo de respirar y su corazón de latir, no muere, pero tampoco vive.