El sueño

Me dijo mi abuelo una vez, que había que soñar algo con mucha, mucha fuerza y que eso solito después se haría realidad.
Nunca le conté mi secreto a mi abuelo ni a nadie, me la pase haciendo fuerza no mas, hice tanta fuerza que ya los cachetes me quedaron colorados. Por las noches también hacia fuerza con las manos apretadas así que también tengo las manos coloradas.
El sueño de tanto soñarlo se hizo cada vez mas grande; cuando empecé de chiquito tenia algunos colores, pero mientras mas lo imaginaba y hacia fuerza, se lleno de mas mas colores, y cuando se me acabaron los colores le empecé a poner cosas, así cada vez mas y mas cosas hasta tiene una casa adentro, y no solo una tiene una sino dos, una chiquita que esta pintada de rojo y una casa grande pintada de blanco, y cuando me canse de tener una casa y de estar entre paredes le puse jardines, le puse muchas flores un montón de césped, y le puse un cielo que también se hace de noche, pero cuando es de día no tiene nubes grises, siempre hay sol y pájaros que vuelan y cantan, a los que se despiertan tempranito les gusta cantar a la mañana y hay algunos, que por alguna razón que mi abuelo no me explicó, solo cantan por la tarde hasta que se esconde el sol.
A veces mientras sueño y hago fuerza me quedo dormido y sigo soñando, y me puedo subir a los árboles sin caerme y todo.
Yo ya soy grande y mis amigos me preguntan porque tengo las manos y los cachetes rojos pero a mi me da vergüenza contarles la verdad, así que me pongo mas colorado aun y ellos se ríen.
Mi abuelo ya se fue a vivir dentro de mi sueño y yo no se si se olvido de decirme algo o qué, porque yo sigo haciendo fuerza despierto y durmiendo y no se si talvez, a lo mejor, quizás, se haga realidad, por las dudas mi abuelo tenga razón ,yo sigo poniendo cosas lindas y gentes lindas, como mi abuelo, para hacer el mejor sueño de todos los sueños soñadísimos.-