Él no me escucha,
le hablo a una pared que recibe las ondas del sonido a veces rebotan en ella a veces la traspasan,
Intenta entenderme,
pero no lo logra pues sus esfuerzos son tan pobres que no logra ni escucharme,
como una memoria a corto plazo recibe mis mensajes,
desconoce lo conocido una y dos veces,
Una maquina, un sistema con un aire de alma,
al amanecer sus ojos ya estan abiertos listos para comenzar su labor, a las doce talvez a la una aun sigue conectado a la tecnologia,
tarde, a veces muy temprano sus sanguijuelas invaden el descanso de un domingo,
linea divisoria entre el trabajo y el hogar se borro hace mucho,
y todo para que??? segun el sistema, para obtener bienes de mayor valor, para obtener una vida digna.
Estoy resignada ante la realidad industrializada de mi sangre,
Mientras el tiempo consume el retraso de reloj que lleva mi querida maquina, solo espero no heredar la modernidad desalmada de esta mi sociedad...
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