De la tierra donde prevalece el llamado "sexo débil", donde hay grandes cerros y un largo mar, un hermoso puerto, lo digo por su gente, sus lugares, su aroma y tranquilidad. En donde solía correr cuando era apenas una niña, cuando tenía sueños en los que siempre me veía sentada en mi patio, mirando el mar... esperando la llegada de los buques y las gaviotas cantar. Donde un día sin pensar la naturaleza destruyó mis sueños y hasta el lugar en donde me sentaba a mirar el mar, es terrible regresar y comprender que ya nada es como antes, no están mis amigos esos que jugaban conmigo, mis recuerdos, los lugares que solía recorrer junto a mis padres, todo es destrucción, una nube negra se llevo todo lo que algún día me hiso realmente feliz, mis sueños de niñez… es difícil hoy ver un futuro en aquel puerto, ese que planeé junto a mi mejor amiga jugando a las comadres, haciendo tortas con barro y con esas muñecas que tanto queríamos. La naturaleza se ha llevado algo más importante que el trozo de cemento en donde me sentaba, se llevo con ella los recuerdos hermosos de mi niñez en ese hermoso puerto llamado Tocopilla.