Conocí al Coquito
Vi y conocí... Por primera vez al Coquito...
Escondido entre las zarzamoras... Que cubrían la cerca, la tapia del huerto de mi abuelo...
A los pocos días... Lo vi como perdido entre los cereales...
Dorados de cebada, trigo y centeno...
Compartiendo su rojo fuerte...
Con el rojo delicado de una amapola...
De semillas negras...
Esta vez... Lo encontré...
Cariñoso, cercano, atrayente...
Los trigos... Cebada y centeno... Sienten cosquillas...
Se inclinan... Y ven que proceden...
De una nube de coquitos...
Unos brincando, otros corriendo...
Algunos volando por los surcos del huerto del abuelo...
Hacía mucho tiempo... Que no veía un coquito...
Le pregunté: ¿Dónde te escondes, dónde te metes?
¿Donde habitas ahora?
Han construido una Escuela de Párvulos, de niños pequeños...
Lindando con el huerto del abuelo...
¿En éste tiempo qué has visto?...
Me ha gustado, me ha encantado la fuente, su agua...
La luz y la sombra que encuentro por todos los lados en el huerto del abuelo...
¿Te has fijando en las enredaderas... Llenas de hojas verdes... Pronto cubiertas por flores?
Dentro del huerto... ¿Qué has visto?
Diversidad de árboles frutales...
Haciendo compota con ciruelos, higueras, cerezos... Con su fruto redondo y picudo parecido al Coquito...
Al verme los niños junto a la escuela...
Me preguntaban... ¿Tu apellido cuál es?...
Como corro... Vuelo... Ando... Por tantos lugares...
En cada sitio me conocen por Sapita o Sapita de Dios...
Una canción dice: ‘Sapita, Sapita, Sapita de Dios, cuéntame los dedos y vete con Dios.’
Me llaman Carralina, Catalina (de Dios) Chinilla, Abuela, Abuelita, Campanilla, Paniera, Coquín de Dios, Coquita de Dios, Coquito de Dios, Cucaracha de Dios, Juanjuanillo, Maragata, Margarita, Mariposa de Dios, Mariposa de San Blas...
El diccionario de la Real Academia: Mariquita...
En la escuela, los niños quieren que vea y juegue con ellos, que oiga sus cantos, que hable con ellos y escuche sus cuentos...
Yo les he contado... La historia de las flores... De los cereales...
Le he contado la historia del castillo, del molino... La historia del canario y del jilguero...
Cuando vuelo y paso por la escuela, todos me miran... Dónde voy, dónde me paro, dónde vuelo...
Me preguntan: ¿Es verdad lo que dicen?... La canción: ‘Cuéntame los dedos y vete con Dios’...
El coquito puso en marcha sus alas... En sus vuelos decía... Mi apellido es: ‘De Dios’
- Salamanca a 9 de Febrero del 2010
• Firmado: Julián López Santolino
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