Esta mañana en punto de la siete recibí la llamada alterada y extraña de mi hermana.
--Este cabrón la volvió ha hacer--, refiriéndose lógicamente a mi cuñado.
Enfadado por la levantada y dormitando aun, le grite: pártele la madre al hijo de la chingada.
A las siete y treinta minutos, mi madre desesperada: tu hermana acaba de matar a tu cuñado.
Puta de mierda y yo sin tomar siquiera un buen café
Texto agregado el 06-02-2010, y leído por 249
visitantes. (1 voto)
Lectores Opinan
07-02-2010
Son chingaderas, pero al café se le respeta... sendero
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login