Desde mi balcón hacia tu ventana,
Hago un canto de ruiseñor,
Declarando mi inmenso amor
Del cual profeso a tu alma.
Labios húmedos, tocados por la brisa de mañana,
Sin dejar rozar el sol;
Copos de algodón, que al sol brillas,
Déjame decirte con ternura,
Que tienes encerrado mi corazón.
Pasa el tiempo de mi funesta caminata,
Ando, ando sin tu brújula,
Dime tú mi zambito,
Si en esta tenue noche,
Te acordase de mí,
Mira a mi fiel amiga,
Cómplice de mis alegrías,
Amiga fiel de los amantes,
Dile, dile que me extrañas.
Me aleje de ti,
Sin saber que eras mi luz,
Voy sin rumbo alguno,
Con los ojos vendados.
Aferrada a tu esencia,
Que es cáliz de vida,
Dime si te acordase de mí,
En esta tenue noche,
Dile mi zambito
Dile a mi fiel amiga, que aun me extrañas,
Como yo al despertar todas las manañas.
NTG
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