“El cielo puede esperar”

El cielo puede esperar a que yo te ame, dejando volar mi corazón. Estas líneas comencé a redactar. Malinterpretando al cielo solo puedo esperar.

Dejando que tus ojos me vean y se dejen llevar.

El cielo puede esperar a que tú me quieras ya que aquí estaré por siempre

Y mi amarga figura resplandece en el silencio viendo como mis lagrimas caen tal cual hoja en otoño.

El frio de tu ausencia que deja tu cuerpo en las mañanas solo son recuerdos vacios de lo que una vez fue; y martirizándome en esta oscuridad solo se escucha el latir de este corazón roto.

El cielo puede esperar a que deje de pensar en ti, sin embargo solo tu silueta se dibuja en aquella esquina donde me besaste por primera vez.

El viento juega entre mis oídos y le oigo mencionar tu nombre y me pregunto “¿será alguna broma?”, no, es solo que te extraño.

El cielo puede esperar a que deje de vivir ya que te has llevado lo que hay en mi interior y el mismo cielo me reclama esta soledad y yo callada dejo al silencio hablar.

Y no sé si volverás solo quiero que no abuses de esta inspiración y no acuses a este corazón porque hasta que tu vuelvas, se que el cielo, puede esperar.