Suena el teléfono y yo contesto:
-¿Aló?-
Una voz masculina y bien modulada pregunta:
-¿Es posible hablar con el señor Tal y Tal?
-Aquí habla Tal y Tal ¿En que puedo servirle?-
-Señor Tal y Tal, mi nombre es Oscar Gallegos y represento a la Compañia 'Neptuno' ¿Ha considerado usted que al morir, su cuerpo sea cremado?-

-¡Aló!-
Vos femenina, joven y tierna:
-¿Está en casa el señor Tal y Tal?
-Aquí habla Tal y Tal ¿Decía?-
-Mi nombre es Alida Pereira llamándolo en nombre del Cementerio 'La Colina de las Rosas' para ofrecerles nuestros servicios completos y económicos: nichos, tumbas y si prefiere: crematorio, bella capilla y si escoje ser cremado, sus cenizas se le entregarán a sus deudos en una elegante urna del estilo que usted escoja.

¡Ring-ring!

-Si?-
Dama de edad madura, casi susurra, convincente:
-Señor Tal y Tal ¿Ha considerado la posibilidad de vivir en la compañia de otras personas más o menos de su edad en una casa amplia y elegante con todas las comodidades, tres comidas diarias de primera y servicio médico constante? En esta hermosa casa....

Me recuerdo que todo esto comenzó hace algún tiempo cuando al comprar un boleto para entrar al cine , la sonriente taquillera me advirtió: 'El precio de este ticket es ya con el descuento de $2.00 cortesía para personas de 'Edad de Oro'.
Yo no 'calificaba' todavía a tal edad y estuve a punto de aclarárselo, pero una voz interior me dijo 'Aclárale y le pagas más, baboso'. Me tragué el orgullo, se lo agradecí y me ahorré los $2.00.

Entrando al banco se me cayeron las llaves del coche y de inmediato una muchacha de unos treinta años y por cierto bastante bonita, agachándose las levantó y entregándomelas con una sonrisa me dijo: 'Aquí están sus llaves, señor'
¿'Señor'? ¡Si antes de botar las llaves estuve a punto de decirle un piropo!

A punto de abordar el autobús, una dama en sus cuarenta, haciéndose a un lado ofrece 'Pase usted primero, señor'
¡Y dale con el tal 'señor'!

Un muchacho adolescente, cuando iba a entrar a la ferretería me abre la puerta cortesmente: 'Usted primero, abuelo'.
¿'Abuelo'? ¿Es que se me nota ya? ¿'Ya'? Bueno, yo soy abuelo de cinco nietos, todos menores de doce años ¡Pero éste tenía lo menos quince!

Antes de que muriera mi madre, ya estando en el hospital, se quejaba de dolor en la espalda, yo estaba dándole un masaje cuando pasó una dama visitante e intrigada me preguntó '¿Su esposa?'

¡Que no me amuele la gente!: presión arterial 120/75, sin diabetis y el colesterol bajo (es decir, no MUY alto), evito comer mantequilla, bebo un vaso de vino tinto diario, dos cápsulas de aceite de bacalao y una aspirina de 81 mg, voy al gimnasio tres veces a la semana y esoy subscrito al 'Club de la película semanal erótica'.

-Aló-
Voz carrasposa:
-Soy el notario Jeremías Sarmiento ¿Ha hecho su testamento?-

Hmmmm...¿Serán pies planos letales? Porque si los son, ya me siento moribundo.