Nadie las recoge, nadie las ve, pero ellas caen una y otra ves. De un vestido nuevo se han engalanado, la tierra las recibe con un beso amado. Hoy me acompañan en un verso nuevo, silencio profundo en un mundo bello. .
Texto agregado el 17-01-2010, y leído por 90 visitantes. (0 votos)