Me devuelvo a estos lugares melancolicos justamente por esa razon: regreso porque cuando leo lo que antes te escribia, me doy cuenta que ya no soy lo que solia ser. No digo que sea peor o que sea mejor, eso solo todos lo demas lo sabran, malamente. Solo que me recuerdo, leyendo todo lo que eramos y todo lo que fuimos y a lo que gracias seguimos siendo, y siento que ya no escribo a como antes lo hacia. Siento que hoy, desde aquella temporada de lluvia, inviernos pausados y velas encendidas, la expresion que tenia hacia a ti se ha apagado de a pedazo en pedazo.
No se si sea cierto o si solo sea un colapso nostalgico por pensar en como aguantaba antes tanto sin verte, por pensar que tengo tanto en no escribirte cosas lindas que me da pena, y lo percibo asi porque te mereces eso y mas, como siempre te lo he dicho. No te he dedicado letras desde hace rato, probablemente porque estoy casi seguro de que no podras leerlas y me da un poco de impotencia. Y aun asi, hoy que intento decirte lo tanto que te amo de una manera pseudo-romantica, no puedo hacerlo de la misma forma como antes lo hacia, y todavia mas dificil, se que no podras leerlo.
No significa que el amor, usando la palabra como mera expresion, se haya reducido por alguna de las dos partes. Solo es que veo que mis letras poco a poco se van tornando hacia otros lados o, tristemente, se van desvaneciendo. No tienes tu culpa de ello, al contrario, eres victima y es por eso que hoy no puedo dedicarte tantas cartas, tantas lineas y tantas historias como antes lo hacia.
El punto es que hoy, Diana, vengo a dejarte esta nota que probablemente nunca leeras, esta nota en donde te digo de nueva cuenta, como en los anteriores meses de septiembre, octubre, noviembre, que te amo; aunque la palabra de risa ajena cuando este escrita, cuando la leo pienso en ti. Hoy me vengo a acordar que si ya no te escribo tanto, es porque ahora te puedo decir las cosas al oido y sin que lo notes, te estoy leyendo mil cartas que hice mientras no estabas, cuando te quedabas dormida o mientras yo me perdia ausente del mismo espacio que tu intentabas reducir.
Es raro, lo se, pero esto de escribir siempre fue lo mio. Y creo que ahora ya no lo es tanto. Valdra la pena volverlo a buscar. La suerte es que tu lo buscaras conmigo. |