Imperturbable, como un lienzo sin pintor. Sin temor a ser manchado, pero con ese miedo q le produce saber q nunca será una gran obra de arte…

Cuando uno esta en medio (aunque se de la nada) esboza sueños en el aire, sujetados por puntillas invisibles. Entonces solo cabe esperar el desplome de ese castillo mágico. Nada se pierde tras las ruinas imaginarias pq nada se había ganado. Supongo q así me encuentro yo, perversamente atado a la banalidad de la neutralidad. Solo soy un soñador barato de sueños caros… tan estúpido.