-.El Trabajo.-
Hoy te hablaré sobre el Trabajo
No todos tienen el privilegio de ser medidos por el Trabajo.
El Trabajo es una Disciplina Noble y muy Calificada para medir a las personas.
Someter diariamente, durante meses y años, la Maquinaria Humana que nos ha sido asignada, a la Disciplina Laboral, nutriéndola, manteniéndola aseada y en buenas condiciones funcionales, implica una fuerza de voluntad y un tesón considerables.
La Unidad que cumple dignamente esta parte de la Misión, aún en condiciones poco propicias y muchas veces adversas, demuestra un sentido de responsabilidad y de cumplimiento del Deber, que puede conmover hasta al propio Padre.
Estos son los Hijos tenaces que necesito. Aquellos que cuidarán mis Dominios, mejorándolos y embelleciéndolos. Son los que sembrarán la Semilla que luego Yo seleccionaré.
Aquellos que cumplan las asignaciones laborales, venciendo dificultades y carencias de materiales y herramientas, me estarán demostrando que con los Instrumentos que Yo les daré, serán Infalibles.
Con esos en Mis Dominios, podré cerrar los ojos y descansar, pues cuidarán de Mi Huerto tal como Yo lo haría.
Quien se muestra siempre atento y calificado, buscando de continuo mejorar su entrega, tratando siempre de dar satisfacción a su Empleador, me la estará dando a Mi.
Si en estas condiciones es sometido a horarios extensos y el Salario es insuficiente, mientras el Patrón se enriquece, el Obrero ha Calificado, pero el Patrón deberá rendir ante Mi.
Tengo medidas especiales para los que trafican con la Sangre y el Sudor de mis Buenos Hijos.
No se amarguen mis Amados Hijos que sufren, pues de su Dolor, saldrá la Fortuna Verdadera. La que se posee por y para siempre.
Y abran los ojos los despiadados que maltratan y sumen en la Miseria a mis Hijos, pues si se duermen en su efímera gloria, pueden despertar como Miserables Verdaderos, condición que ya no podrán revertir.
La Ira y el Desprecio del Dios, hacen temblar a cualquier Animal, menos al Humano.
Con una cuota de Poder un poco mayor, se siente protegido de toda contingencia, y hasta del propio Poder que le dio origen.
Si bien la Semilla es indestructible, su Destino depende de su Gestión Vital, y , en última instancia, de Mi Decisión.
Solo puedo asegurar, que los Destinos finales difieren, y mucho, unos de otros.
Ningún Juez en sus cabales, daría igual condena al múltiple homicida, que al que robó Pan, para alimentar a sus hijos. El Dios tampoco.
No entregaré Mi Semilla, a manos que no respetan la Ética Humana, ni las Normas Morales.
Las manos que toquen Mi Semilla, no serán indignas, ni estarán manchadas con mi deshonra. No importa que los Sembradores sean pocos, pero sí serán Buenos. Guardianes y Cuidadores de Mi Semilla.
Con el Trabajo mido el Temple y la Fuerza, la Dedicación y el Sacrificio que podríais hacer por Mi.
A aquellos que entregan tanto por tan poco, demostrando Nobleza y Resignación, les daré una Tarea mucho más Digna, y el Salario será la Gloria.
Tened Fe en Mi Palabra, y Esperanza de que será cumplida.
La Fe y la Esperanza, alfombran el Camino a Mi Reino, y solo pueden ser tenidas por Mis Hijos.
Ellas ayudan a desarrollar la Virtud y el Amor, haciendo crecer al Dios Interior, que soy Yo.
Cuando el lugar que ocupe en tu cuerpo, sea tan grande como tu, te fundirás en Mi ENTIDAD; habrás llegado a la Meta, cumpliendo tu Misión. Allí asumirás la Gloria, y serás autorizado a manejar el Poder Supremo.
Es un Trabajo que exige mucha dedicación y esfuerzo, pero que produce Fascinación y Éxtasis.
No se te ocurra apurar nuestro encuentro: podrías arruinarlo todo.
El Proceso Vital debe cumplirse total y naturalmente. Ese es el tiempo que yo necesito para estar seguro. Pues si no estoy seguro, no emito sentencia alguna.
El Trabajo proporciona Esperanza de un Futuro mejor. En lo Real y en lo Verdadero.
Trabajad con confianza, venciendo al desgano, la disconformidad, y la insuficiencia salarial, aún en ambientes poco propicios y condiciones adversas.
Cobraréis con creces las diferencias, y te las pagaré con Mi Moneda: la Gloria.
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