Versión ampliada para las reparticiones oficiales y particulares. Pueden incluirse mutuales, Ongs y asociaciones sin fines de lucro.

* La cantidad de empleados en una repartición que atiende la cola de reclamos, es inversamente proporcional a la cantidad de personas que integran la cola. En casos límite, la masa crítica de reclamantes se hace infinita y la de empleados nula.
K= e/r. Donde “K” es la incógnita; “e” la cantidad de empleados disponibles y “r” la de reclamantes.

* Cualquier entidad bancaria que se declare amiga personal de sus clientes a la hora de tomar algún servicio, se convertirá irremediablemente en su verdugo en el momento de refinanciar su deuda.

* Ante la necesidad perentoria de hablar con el supervisor general de una repartición, crecerá geométricamente la posibilidad de que éste no pueda atendernos y se nos derive a un subalterno sin poder de decisión.

* La probabilidad de que el sistema informatizado de una repartición “se caiga”, es directamente proporcional a la necesidad de información que los usuarios necesiten de él.

* Cualquier trámite registrado en el sistema informatizado de datos, tendrá convenientemente dos fotocopias archivadas en algún subsuelo.

* La cantidad de empleados presentes en una repartición es inversamente proporcional al tiempo de permanencia del jefe de la misma.