A veces imagino mi corazón y mi mente con una especie de superpoderes que me permitan trascender del hoy y lo real.
Poder llegar a tu cuerpo, llenarlo, saciarlo de todas las caricias que le daría, no puedo imaginar siquiera ese instante estúpido, en el cual me cansaría de darte besos, de recorrerte de gozarte.
Trascender a estas rejas y estas sombras, formar parte de tu mundo que debe estar repleto de otros amantes, ninguno con el deseo inmenso que dejo en cada letra, en cada palabra, en cada oración de llegarte.
Acaso algún día, te darás cuenta de lo cerca que estamos?. Podrás disfrutar de esta caricia aunque la distancia nos juzgue también y haga que el tiempo nos siga separando?.
Queda en mí tu cabello tan negro, tus muslos rodeando mis caderas, tu peso encima de mi cuerpo, tu humedad, tu inmenso olor a sexo llenando el ambiente y tus gritos cuando sujetando tu cintura empujaba tu cuerpo una y otra vez sobre el mío.
Cuáles serán los brazos que te rodean?.
Quién será ese hombre osado que se atreva a jugar su vida por tocarte?
De hecho te digo que si un día estas rejas no nos separan, voy a ir por tu cuerpo y tu corazón porque más allá del tiempo, que arremete y arrecia, sigo enamorado de vos como el primer día.
Para mi morocha amada. Jorge