- Ella - Aló!

- Él - Que bueno oír tu voz.

- Ella - Quien habla?

- Él - No acuerda?

- Ella - Mi Dios, cuando llegó?

- Él - Hace unos días, aún no conseguí organizarme.

- Ella - Fueron cuántos años?

- Él - ...siete, siete años.

- Ella - Donde usted está ahora?

- Él - En São Paulo.

- Ella - Recibí sus cartas.

- Él - Yo escribí en los momentos difíciles cuando estaba en el desierto.

- Ella - Imagino lo que usted pasó, pero también largou todo y fue ser mercenario.

- Él - Primero por el dinero y segundo por la ilusión de guerrear.

- Ella - ...yo me casé.

- Él - ...........silencio.

- Ella - ...tengo dos hijas ahora.

- Él – Deben ser lindas, se parecen con la madre?

- Ella – Un poco del jeito del padre y la personalidad de la madre.

- Él - ...silencio.

- Ella – Lo que va a hacer ahora?

- Él - ...no sé aún, montar un negocio o volver para Estados Unidos.

- Ella - ...silencio. – Tengo que desconectar el más nuevo está necesitando de mi atención, yo agradezco su conexión.

- Él - ...hasta más, fue bueno hablar con usted.

- Ella - Yo también! - Espera hijo la mamá ya va! – Tchau!

- Él - ...coloca el teléfono en el gancho, una enfermera lo llama,
Señor? - es su vez. Él sale andando de muletas y entra en la sala del médico.

- Médico - Bueno día!

- Él - Bueno día, doctor!

- Médico - Vamos allá, me cuenta como aconteció a la amputación de su pierna?

- Él – En la guerra, en la guerra doctor, pura ilusión, por culpa mía no perdí sólo la pena.