MÓRBIDAS OBESIDADES
(Tragedia en dos actos)
Lo vide en la “Tele”…
¡Cuán triste el suceso!…
Se explica la “mámma”,
Rubrica el proceso:
“Teroides y harmonas”,
Y un hijo “de peso”…
(Con catorce abriles,
Tonelaje y medio)…
¡Pobre de la madre,
Cuánto sufrimiento…
No tiene pecunia
Para el tratamiento…
Pendiente del hijo,
Del retoño obeso,
Ludibrio y escarnio
De los compañeros…
¿Quién me echa una mano,
Señor del Gobierno?...
¡Y ansí pedricaba,
Pero era en desierto!.
La mole de carne,
Caminaba lento,
Sudando, escocido
Por todo el pernero…
Con lechuga y nabos,
Zanahoria y puerros,
Igual que con carne,
Engorda lo mesmo…
Con el endocrino,
Con el carnicero,
Y el metabolismo,
Harto puñetero…,
A las cuatro esquinas,
Jugaba el mancebo…
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Caso parescido
Y en carnes, tocayo…
Ocurre en Galicia,
En gueto gitano…
Y la parentela,
Desde el “pa” hasta el “yayo”,
Maldicen las normas
Del indino “payo”,
Que, a traición, obliga
A dieta, al muchacho…
Que “no está relleno,
Es que nació ancho”,
Y quiere la “mama”,
Tenerlo cebado,
Por el embutido
Del veniente año…
Y, aunque he puesto broma,
En este relato...
Se le abren las carnes,
Hasta al más pintado,
Y da gracia al cielo,
Que no le ha tocado...
EMILIOSALAMANCA
13 Diciembre 2009
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