El fuego se aproxima, puedo saltar al vacio o morir de ti, puedo contar noches sin sueños y lunas sin color, puedo esperar a que como nunca lo has hecho vengas y me rescates, me des tu nombre para volver a esculpirlo sobre mi piel. Puedo pretender que vendras y me sacudiras el alma con tu mirada y me diras pidiendo clemencia que desista de mi locura, pero seria mi muerte como siempre, como siempre amor......

Ya no hay sol sobre el cielo, el viento gris se lo ha llevado, ya no puedo ver tus manos, tu cuerpo, tu cara, mi fe ya no te alcanza en este vacio de no tenerte, palidezco indefenso del desden de tu mirada y poco a poco se me terminan las horas, el viento gris que no encuentra tu aire en mis pulmones me recrimina inclementemente de tu ausencia, de la lejanía de tus caricias.

La cornisa me mira desafiante , estoy casi seguro de saltar para salvarme de tu piel que no me quiere, de tu mirada de lastima que me atormenta. El adios de tu sonrisa me reta a tomar mi triste final, la lluvia no cesa y moja mis manos impotentes que nunca supieron de ti, entonces decido bajar y decir; de cualquier forma ya estoy muerto.