| … me escondí entre los árboles observando desde lejos, bajé a la playa y me fui acercando moviéndome sigilosamente por las rocas, durante horas pensé en la manera de atraparlo. Caía la noche se dirigió a mi una voz:¿ porque  me observas? ¿Qué quieres de mí?
 
 Enseguida me di cuenta de que era el mar que me hablaba, yo le contesté: sólo  quiero un pedazo de ti, sólo eso, eres inmensamente grande, aunque yo  me lleve un poco apenas lo notarás.
 
 El Mar se enfadó mucho,¡como eres capaz de pedirme algo así! -gritó –  estaba realmente enojado  y no sabia como hacerle entender que tenía una razón muy poderosa…
 ...finalmente pasadas unas horas se calmó y le pude explicar:
 Mi Amor está muy lejos, yo puedo venir a menudo a verte pero él no, te echa mucho de menos… sólo quiero regalarle un pedazo de ti  porque a veces te  necesita tanto como yo.
 
 El Mar se sintió muy halagado, noté que sonreía  por dentro  pero me respondió que era  un “imposible posible” que si todo el mundo le pidiese lo mismo acabaría  por desaparecer.
 Quise que me explicase lo que quería decir pero simplemente me dijo: "algún día lo entenderás".
 
 Me marché  pero decidí no darme por vencida; al día siguiente muy tempranito volví a la playa  y me senté en la arena  observándolo y esperando, pero ni me miró…pasó el día  y extenuada  me fui a dormir...
 
 Decidí pedirle ayuda a Marte ¡por favor intercede ante el Mar por mi, necesito  tu ayuda! y sé que hasta dentro  de muchísimos años no podré volver a hablar contigo, dile  que me deje llevar  un pedazo a mi amor; pero Marte estaba muy entretenido, desde todas partes del mundo miraban para él y ni siquiera  me vió.
 
 Intenté hablar con el Viento  pero me dijo que desde hacia muchos años no se hablaba con el  Mar, una noche, la Luna se apiadó  de mí y le hablo al Mar:
 …mírala bien…está cansada lleva días esperando…creo  que por lo menos se merece que la escuches, ya te ha demostrado que realmente es muy importante ¿porque no piensas algo para pedirle a cambio? el mar se quedo pensativo, una vez más sin dirigirse  a mi se fue a dormir; sin embargo las palabras de la Luna flotaban en las olas y no le dejaron dormir  en toda  la noche
 
 A  la mañana siguiente, como  siempre al amanecer, me senté en la arena esperando a que el Mar me mirase y está vez me dijo: ahora no puedo, hoy es un día de pesca y tengo que cuidar de los marineros y de sus barcos, el Viento traidor quiere jugarles una mala pasada, pero vuelve por la noche y te diré lo que quiero a cambio.
 
 A pesar de sus palabras, como cada día me quedé sentada  hasta el anochecer pensando que es lo que me diría y sobre todo  que es lo que yo podría  tener que el Mar ansiaba.
 
 Se hizo muy tarde, era de madrugada y el Mar no daba señales  de vida, finalmente como venido de un sueño profundo empezó a hablarme: ha sido un día muy duro  pero como se que has estado aquí esperando te diré lo que quiero…durante años te he observado recogiendo por las mañanas conchas y caracolas de la arena, son parte de mí, únicamente  las dejo un rato descansando en la arena pero cuado sube la marea  las vuelvo a llevar conmigo y a veces  he notado en falta a algunas de ellas, me gustaría que las devolviese a su lugar, aquí conmigo.
 
 Me quedé perpleja, durante los últimos años  he recogido  conchas de la playa  uno o dos días al  año, y no pensaba que el mar me vigilaba y menos  que con eso le estaba causando alguna pena, ahora tengo muchas conchas y caracolas guardadas  en mi habitación, es mi forma de tener un poco de Mar conmigo, el  Mar continuó: Devuélvelas y a cambio te dejaré llevar de un pedazo de mi para tu amor.
 
 Sin pensarlo dos veces corrí a mi casa y uno tras otro vacié los frascos de cristal,  me di cuenta  de que el mar era un poco más feliz, que realmente echaba de menos sus conchas, sus caracolas y tan feliz fue que me dijo:
 "ven al caer la tarde porque el Sol me ha prometido venir a hacerme una visita y así tu amor me puede ver lleno de luz"
 y añadió: "cuando venga hazme saber que es él de alguna manera y yo le acariciare los pies con las olas, tiene que ser alguien muy especial para que tu hayas luchado tanto por darle ese poco de felicidad".
 
 
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