Para Ruquilia,
cuando en nuetstra juventud, atrevernos a dar besos que duraban segudnos eran lo mas escandfaloso que podiamos hacer y teniamos que escondernos muy bien con miedo con nervios para que nadie nos viera lo pecaminosos que eramos.
Gracias a mi hija Salomonita que me supervisó la captura de este poesia (lo estoy haciendo yo solo casi) Ai la llevo
buscaba ayuda y
Atravesé tu cuerpo con un cuchillo
pues mis lágrimas se agotaron, cebolla.ç
ayudame cebollita
necesito seguirle llorando a mi ruqui
llename con tus jugos lacrimogenos
auxilio
hermosa ceboolla, blanca como ningua
empapa mi shojos
encebolla mis aparpados
liberame con esos llantos
que me traen paz y gozo
porque le estoy llorando a mi riqui, digo ruqui
porque ya no le puedo dar besos de segundos
puies ya se fue
sucumbi y cai
de tanto lllorar me había deshidrataod.
Texto agregado el 02-12-2009, y leído por 360
visitantes. (5 votos)
Lectores Opinan
02-12-2009
Dejaste una ( C ) caíndo al agua desde una considerable altura ; no mereces una. esferografica
02-12-2009
¡Sangre y cebolla! ¿Dónde puedes encontrar lágrimas? En mis ojos, y algunos versos llevo guardados en un bolsillo, con cinco estrellas, para ti. maravillas
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login