-Conociendo el sentimiento jamas probado:

Caminaba tranquilamente por la acera, a unos cuantos metros de mi casa, fue hay cuando lo sentí, fue lo más escalofriante y a la vez relajador, un calor infinito que quemaba mi cuerpo rápidamente, partiendo en el pecho, para llegar a las uñas de mis pies en una fracción e segundo, me provoco un hoyo negro en el estomago, pero siempre reconfortador, era totalmente inexplicable, tan inexplicable como el propio Dios. Comencé a llorar, de la manera mas solitaria que se puede imaginar, creo yo, pero no podía entender por que la pena y la desolación se acompañaban de una gran felicidad, la que al parecer era el quemar que sentía hasta en mi apéndice, lo único que puedo decir con seguridad es que el calor era la “felicidad”, y que la melancolía fue el frió que le siguió, tan helado y tan chocante, que sinceramente pienso ha sobrepasado los -273 grados celsius, temperatura mínima absoluta, según mi nuevo profesor de física. Simplemente la ciencia, por primera vez no ha podido explicar algo en mi.
Entre como un cuerpo inerte a la casa, para seguir así hasta llegar a mi habitación, nada me detuvo, ni siquiera mi preocupada madre, solo sentía que nada en mi vida tenia ya mas importancia, algo faltaba, un pedazo de mi alma, un pedazo de mi, robado por alguien, el cual tenia que descubrir, pero ¿Por qué?, ¿Como? ¿Cuando?, eran demasiadas preguntas por resolver, a las cuales no les hallaba una lógica explicación, todo había sido tan.. normal, tan monótono, común, como es de mi costumbre, no hubo nada mas que risas, abrazos, despedidas, etc. todo dentro de lo normal.
Desperté totalmente perdida en mi habitación, sintiendo absolutamente nada, por un momento sentí un pequeño alivio, tan corto que ni siquiera recuerdo como fue, cuando comencé a mirar los 3 lados visibles de el lugar, cada objeto por los que pasaba mi desconcertada mirada, comenzaba a desaparecer, se volvía poco a poco mas negro, y comenzaba a volverse polvo, que volaba por la abierta ventana, rápidamente me escondí, entre las sabanas y con un pequeño mecho de pelo en la cara, sentí unos pasos, alguien abría cuidadosamente la puerta de ese vació cuarto, me escondí mas aun, al instante la puerta se cerro de un golpe fuerte y seco, el que ni siquiera provoco un pequeño eco, el sonido fue tan escalofriante que me destape automáticamente con los ojos medio abierto, pude visualizar solo una sombra, debido a que mis pestañas tapaban la mayoría de mi visión, por lo que me vi obligada a abrirlos completamente, tenia un terror inmenso, pero la curiosidad ganaba claramente la batalla, la sombra se volvió una joven en la esquina izquierda de la pieza, estaba parada con su cara agachada, muy dañada, solitaria, con solo ver su posición se notaba que estaba arrepentida, sufriendo totalmente sola y abandonada, lentamente su cara se levanto hacia mi, su mirada enfrió todo mi cuerpo, al igual que la pieza, comenzó a caminar hacia mi, congelando todo a su paso, paulatinamente se volvió mas diabólica, su rostro no daba pena, mas bien aterraba, su caminata se volvió mas rápida y potente, solo quería que desapareciera todo, se escucho a lo lejos, mas bien como un eco en un túnel un pequeño grito, la joven se asusto y todo comenzó a desaparecer, había despertado, gracias al grito de mi madre gritando que me levantara, el cual me ayudo volver a la realidad para asegurarme que todo había sido tan solo un mal sueño. Tan solo saque mi pie para levantarme cuando ya la sensación estaba de vuelta en mi cuerpo, sin embargo la potencia era bastante menor, por lo que me pida permitir tener cordura y conciencia de mi ambiente, realice mis actividades diarias de la mañana con un poco de dificultad, la dificultad suficiente como para preocupar a los de mi casa, no hubo comentario, pero sus rostros eran tan transparentes como un vidrio, lo que me permitía “leer” o adivinar con mucha certeza sus pensamientos. Al llegar a el colegio el dolor se volvió casi insoportable, no obstante la mezcla de sensaciones desaparecieron, era solo una angustia, acompañada de mucha presión, como al parecer es de costumbre, al entrar a el salón todo fue normal, los mismo compañeros de siempre (no se por que pensé eso) quería que llegara alguien nuevo, un hombre en realidad, debe ser por mi falta de comunicación hacia ellos, en fin nadie se dio cuenta de mi dolor, porque todos estaban muy preocupados con sigo mismo, con problemas superficiales o con sus vagas emociones que creían profundos e importantes, salude a la mayoría como suelo hacerlo, pero una manera tan fría y tan fantasmagórica, que muchos lo rechazaron. Es que no entendía que me pasaba, estuve nueve horas pensando en lo mismo, sin escribir, sin hablar, sin reír, era un objeto desconectado, una mecha apagado, un cuerpo sin alma, deje de ser una persona , esta cosa en tan solo un día me consumió por completo, como el fuego a la madera, no era mas yo, la risueña, la enojona, la “niña buena para hablar” según... todos, tan solo un día le basto a ese monstruo para hacerme desaparecer, así siguió la semana, el dolor aumentaba por segundo, al igual que el llanto, el frió había apagado todo el calor y felicidad existentes en mi, era solo pena, soledad, un vació interminable, el cual me combinatorio en un humano hueco, la voluntad no existía, todas mis actividades se basaban en lo que otros me ordenaban, no podía hacer nada al respecto, la concentración de mi parte hacia esta vacua sensación era tan grande que solo me limitaba a respirar y seguir las ordenes de los demás, no podía dejar de pensar en las 3 preguntas mas comunes en el planeta tierra: ¿Por qué?, ¿Como? y ¿Cuando?, trate de visualizar cualquier tipo de respuesta, pero nada era suficientemente ilógico o sobrenatural para ser posible, llegue a pensar que todo esto era tan solo un sueño, o que estaba en coma debido a un accidente, es que no me podía permitir que esto fuese real, no podía.
Volví ha despertar en ese cuarto vació, que al parecer era mio en el sueño, pero esta vez la muchacha no se encontraba sola, había una sombra junto a ella, muy difusa, imposible de diferenciar entre hombre o mujer, estaba muy cercana a ella, una de sus manos se sujetaba la cintura de la muchacha y la otra acariciaba suavemente su mejilla ruborizada. El dormitorio ya no estaba congelado, incluso la temperatura era bastante agradable, como los de esos días antes de la primavera, donde el uniforme se vuelve tu mejor amigo, y el sol alegra el día de los condenados en el infierno. Después de unos segundos la sombra comenzó a tomar forma y volverse mucho mas clara, era un hombre, muy relajado, feliz, conforme con su vida, lleno de amor y paz, este traspasaba todas estas emociones a la solitaria chica, llenado casi por completo su cuerpo, a excepción de su mano derecha, al ver esto ambos se alteraron, el ambiente se volvía cada vez mas tenso, el frió comenzaba a tomar control de el cuarto, ya no eran felices, la joven tomo nuevamente esa cara sádica y malvada, ahora se dirigía hacia el chico, pero en un segundo todo volvió a desaparecer, me había despertado,quede bastante molesta, quería ver el final del sueño, acoso estaba relacionado conmigo, o solo me estaba volviendo loca, una película me había afectado., o la adolescencia ? Con este sueño nació una ridícula esperanza de que todo cambiaría, el vació se lleno, la angustia desapareció, el llanto fue remplazado por una perfecta sonrisa y un cosquilleo algo incomodo se apodero de mi estomago.
El colegio fue totalmente normal y por primera vez después de esa semana, mantuve un par de conversaciones con tayler y Andrea. Al ver que ya era la misma creo que mis compañeros volvieron a la misma confianza de siempre. En clase de ingles me senté junto a Camila, debíamos trabajar en el libro de ingles, sin embargo nadie siquiera lo abrió, todos conversaban, Luisa y Andrea por un lado, Constanza, María, Mercedes y Alejandra por otro, y los hombres conversando sus típicas babosadas, no obstante una que otra vez Felipe y Mario se salían del grupo para discutir mi preocupante estado, por mi parte estaba callada, hasta que escuche un pequeño susurro bastante preocupados
.- ¿Qué pasa Catita?
La pregunta me puso bastante incomoda, me encogí de y levantarme la vista del libro para comprobar de quien provenía la pregunta, estaba claro que era Camila, su relajante voz y su preocupada pregunta era única de ella. La mire algo enojada y conteste:
Nada
Pues no te creo, contesto bastante enojada, en tan sola una semana dejaste de ser tu, algo te sucede, y quiero saber que es.
Automáticamente mis ojos se nublaron con una cortina de lagrimas que tapaban mi vista, algo avergonzada conteste:
Es que no se que me pasa, no tengo control de mi persona
¿Como es eso? Se inquieto lo suficiente como para cambiar su mirada de preocupada a asustada,.
No mate a nadie, le respondí con una con una corta risa (aunque no de felicidad)
Lo se, no serias capaz... Hizo una pequeña pausa para ver su libro y escribir una palabra, y antes de que saliera su primera palabra la interrumpí
Sentía un agujero, un vació, sentía pena , dolor soledad, tuve una pausa bastante grande, me sorprendió que no aya dicho algo, no es el momento mas apropiado para hablar esto.
Bueno, en el almuerzo conversaremos mejor, pero me tendras que decir todo, todos estamos muy preocupados por ti.
¿Enserio?, y ¿por què nadie me pregunto algo la semana pasada?, le respondi muy molesta.
Es que, se encogio de hombros y agacho su mirada, como un perro el cual estan retando, pensamos que no era nada.