Bueno querido lector, en esta ocasión me voy a ahondar en un tema poco agradable –sépame disculpar- un tema al que todos le esquivamos. Un tema que no hace diferencias entre clases sociales, sexo o religión. Un tema de mierda si se me permite la expresión literal. Si, digo literal porque “La Lógica del Escato”, no es mas que un titulo que culmina con una palabra inventada solo para engañar al lector desprevenido y curioso, pero en realidad solo es un absurdo y poco lucido juego de palabras para no decir Escatológicas, palabra de mierda si las hay. A mi particularmente me resulta mas desagradable que decir mierda. Bueno, retomando la idea inicial, la cuestión es que siento la obligación de ahondar este tema tabú, (eso de ahondar me suena a tener que sumergirme entre soretes), un tema que choca por el mal gusto y mal olor, en fin contra los cinco sentidos. Como dije al principio, un tema que todos esquivamos, sobre todo en las veredas en donde garcan nuestros queridos amigos los perros. Un viejo dicho popular dice que si pisas mierda es suerte…!!¿¿Suerte??¡¡ Si, pensemos que es mejor pisarla que usarla de protector solar, desde ese punto de vista es suerte. Discúlpeme ser tan soez, pero le advertí que era un tema de mal gusto. No se quien mierda probo mierda para decir que tiene mal gusto, pero nos imaginamos que lo tiene aunque si existen los coprófagos, alguien debe haber probado y creo que debe ser Mingo, mi vecino de enfrente porque en cuanto habla, su aliento es casi un pedo. Perdón me fui a la mierda, retomando. Es un tema que discriminamos y negamos inconcientemente, pero es tan natural como respirar. Nadie quiere imaginarse a los seres queridos defecando y mucho menos a los amados. El defecar mata al romanticismo, la sensualidad y el erotismo, ya lo exclama el decir popular: “Si quieres olvidar a la mujer que estas amando, imagínala cagando”. Como dije antes, es un tema que negamos, a tal punto que solo dejamos que los demás se enteren que defecamos cuando no nos enteramos por ser bebes sin conciencia. Ya de grandes garcamos solos por unas cuantas décadas y hasta con vergüenza si lo hacemos fuera de nuestros hogares. Recién de ancianos -también sin conciencia- volvemos a dejar que los demás se enteren que garcamos entre pañales para adultos.La parábola de la vida misma. La caca tiene mil sinónimos pero el hombre trato de nombrarla de algunas formas elegantes como por ejemplo heces… ¡¡Pónganles el nombre que quieran pero es mierda hermano!! Esa negación a decir las cosas por su nombre nos lleva solo a la confusión. En cualquier publicidad televisiva muestran una mujer estreñida y hablan del transito lento, no me jodan!! Transito lento es un embotellamiento vehicular en una autopista, esa pobre mujer no puede cagar!! Igualmente pienso que el cagar –al igual que la muerte- sufren de mala prensa. Todo el mundo festeja un nacimiento o una buena comida, pero nadie la muerte o una buena cagada, en definitiva dos caras de una misma moneda. En este punto se me ocurre un doble motivo de no festejo, aquel sujeto que se cago muriendo. En fin, para terminar dejo una reflexión. En un mundo regido por ambiciosos políticos insensibles digo que la palabra mierda queda corta para definir a estos seres que se cagan en absolutamente todo. Decir que son soretes es insultar a los soretes que de ultima sirven para abonar la tierra, o sea que algo de nobleza tienen, cosa que los políticos de hoy día no.