Me gusta ver como me mira
desde aquellas fotos,
con la mirada húmeda y lánguida;
Con los ojos llenos de sombras de agua
rojos de tristezas antiguas
y cuajados de blancos reflejos de luz
de alegrías tempranas.

Me gusta ver como me mira
desde aquellas fotos
con esa mirada deshojada que tiene
y como caen sus ojos como cae la nieve
o los luceros caen rendidos
a la muerte del alba.

Me gusta ver como me mira
desde aquellas fotos
con la mirada desgarrada
y los ojos perdidos en la distancia;
Embebidos en la nada plena
de mis ojos, es así como los llena;
Con los suyos hundidos
para siempre desde su eterna negrura
al profundo verde mar de mi mirada.

Me gusta ver como me mira
desde aquellas fotos de imagen sin alma,
porque no captó la cámara su tibieza
ni su calido aroma, ni su voz,
ni el amor que emana;

Porque esas cosas que no se ven
son las que, en verdad, me hacen amarla.