FRENTE AL ESPEJO
(Mirando a Matusalén)

Pido permiso para dejar de ser la que soy
caminar libre por los tejados
a la luz invisible de un farol.

Pido permiso para ser sólo mujer
y vomitar mi rabia,
bailar sobre tu mesa
y escupir sobre tu cara,
decrépito conquistador...

Pido permiso para gritar
todo el desprecio
y que nada me importa
esa cara de perro apaleado
babeando en las esquinas...

Pido permiso para viajar lejos
al país de mi infancia
a mi calle de adoquines
a mi patio sempiterno
de luces y sombras amigas
de mis años venideros...

Pido permiso para reir a gritos
y decir que eres un maldito cobarde
lechón con viagra
resollando a mis espaldas.
Qué lástima, no te funcionaba...

Pido permiso para levantarme temprano
caminar de madrugada
y bañarme desnuda
en el espejo de mi barrio...


Pido permiso para sentarme en la puerta de mi casa
a ver pasar tu miserable cadáver,
gordito y rechoncho
sin un libro que te retrate.

Pido permiso para ausentarme
de tu funeral, perro vendido.
Llorón como ninguno, maldito miserable.

Pido permiso para llamar la atención
de los perros callejeros
y los gatos con su traje y su chistera.

Pido permiso, frente a un espejo
para mostrarle al mundo
tu cara de cerdo
serpenteando
bajo las polleras que te defiendan
cobijado y tembloroso
llorisqueando por tus versitos malolientes
y tu triste imagen que no vende.

Pido permiso para tomar el tren
mirar el mundo en un espejo
y ver el cementerio
que en un cerrar de ojos se perdió...

FATAMORGANA
Patricia Lara Arriagada