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Inicio / Cuenteros Locales / jjat75 / Cuento no tan corto

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Hace mucho tiempo, casi tanto que ni me acuerdo, me pregunte el porque de las cosas, como un juego, tratando de esquivar una respuesta a una pregunta comprometedora, mi novia me preguntaba si no pensaba en casarme, en formar una familia, y casi por azar, le tire una pregunta que desde ese día, cambio el destino de mi vida, y hasta se transformo en casi una obsesión... ... - No pensaste alguna vez en el porque de estar en este mundo aquí, ahora?, No te preguntaste nunca el porque de que las cosas existan?, Porque el perro ladra y no habla?; ella me miro, se enojo y dijo que yo siempre esquivaba el tema, que yo no la quería, que solo la usaba para satisfacer mis mas bajos instintos (esto no lo dijo con esas palabras, pero no cabe decir exactamente cuales fueron), y yo, yo me quede pensando en lo que había preguntado, ella hablaba, ya casi no entendía lo que decía, solo escuchaba ese murmullo molesto de una muchedumbre gritando cosas distintas, solo ruido, solo deseaba que se silenciara!!!!!!!!... ...y ahí fue cuando me olvide de todo; cuando desperté, estaba en una habitación de paredes acolchonadas, el cuerpo entumecido por golpes, la garganta seca, la visión borrosa, y cuando me quise incorporar, me di cuenta que estaba maniatado a mis espaldan, no, no estaba atado, no, era una camisa de fuerza, estaba en un manicomio; en un loquero!!, Cómo llegue ahí?, Yo no estoy loco!!, Que no entienden, no se que paso, pero se que no estoy loco!!.
Los minutos corren despiadadamente, pero las horas se hacen lentas, en realidad no tengo idea ni noción del tiempo, no se porque estoy acá, ni tampoco porque estoy tan magullado, habré tenido algún accidente?, No creo, estaría en un hospital, no en un manicomio.
Pasaron tantos minutos como quieras imaginarte, pueden haber sido días u horas, pero pasaron, lentamente, con pequeños o largos periodos de sueño en el medio, pero pasaron. En ese preciso instante, apoyado sobre una de las paredes (que si no fuese por la situación en la que estaba se podría decir que hasta son cómodas para sentarse en el piso y apoyar la espalda en la pared) en la lejanía, escuche un ruido, muy vagamente podía percibirlo, pero lo escuchaba, era casi rítmico, casi estaba seguro que tenia una frecuencia, y que el espacio entre un sonido y otro era el mismo, casi como estar escuchando la maquina de un reloj. En realidad, era tan poco el sentido del tiempo que tenia en ese momento que no podría precisar si era un tic tac parejo, o no, si eran segundo, minutos u horas las que corrían entre uno y otro (porque tic tac?, Porque no ping pong? U otra cosa?). Pero ahora ya tenia como medir el tiempo, por lo menos mientras estuviese sentado en ese lugar, con la oreja contra la pared.
Ya habían pasado 17.524 servs ( así llame a mi medida de tiempo, porque como solo era mia, le podía decir como yo quisiera, total, quien me iba a decir algo?), Y fue ahí cuando sentí que la puerta se habría, en esas fracciones de servs, mi corazón empezó a latir mas fuerte, lleno de emoción, por fin me iban a sacar de ahí, se iban a dar cuenta de que todo era un error, y me iban a sacar por fin de ahí; Pero a su vez, tuve miedo, no se si quería que me sacaran, porque si los que me pusieron ahí eran los mismos que me habían golpeado, no estaba en buenas manos, y aparte, y lo que mas me importaba, ahora que empezaba a reinar en mi mundo, que ya tenia mi propia medida de tiempo, mis servs eran solo míos, y me respondían a mi, era dueño de contar mi tiempo como yo quisiera, y nadie podría decirme nunca que iba a llegar tarde, o que si no creía que ya era tiempo de casarme, no, porque el tiempo era mío y corría a mi antojo, no, no quiero perder eso, que se vayan nomás, déjenme en paz!!!!!.
Entraron, me agarraron por los brazos (eran muy fuertes, porque entre los dos me levantaron sin el menor esfuerzo) y me arrastraron hasta una de las esquinas de la habitación. Uno de ellos me empezó a revisar, me miro los ojos, la garganta, parecía un pediatra tratando de justificar ante una madre preocupada, el costo de la consulta, mientras tanto, el otro preparaba algo en una gran jeringa, y me explicaba por puro protocolo que era lo que me iba a poner y que me iba a ayudar a descansar, y que me relajara, que no me iba a doler... ...y otra vez me paso, esa sensación que solo estas escuchando el bullicio de un patio de recreo en escuelas primaria, y otra vez, tuve una reacción, y otra vez, me olvide de todo.
Ya no se cuantos servs después, desperté, en la misma habitación, con la misma camisa de fuerza, pero con muchos mas magullones, con casi infinidad de golpes y moretones, y además, si no me equivoco, me falta un diente!!!. Malditos bastardos.
Se me planteo un gran problema, como iba a hacer para saber cuantos servs pasaban mientras dormía?, Cómo iba a controlar los servs que demoraba en llegar de nuevo ese par de gorilas que me habían golpeado? No se me ocurría nada, hasta que me di cuenta, que si los servs que deberían pasar mientras dormía no podían ser contados, era porque yo no dormía en realidad, sino que entraba en un estado al que llamaremos "la cueva", solo porque quiero que se llama así (recuerden que los servs son míos y con ellos puedo hacer lo que yo quiera), en la cueva, los servs no corrían, sino que se frenaban, hasta que mi organismo había recobrado las energías necesarias para continuar controlando el paso de los servs. La cueva también tenia otras aplicaciones, por ejemplo, en la cueva entraba todo lo que había pasado en mi vida entes del nacimiento de los servs, y en realidad ellos no nacieron, sino que los descubrí yo al salir de la cueva (que fue cuando me desperté acá), porque en realidad siempre existieron, pero yo no estaba al tanto, y tantos otros que no sabían nada, y me pregunto, quienes conocerían de la existencia de los servs?, Será por eso que me tienen acá encerrado?, Quieren evitar que se sepa lo de los servs, y eso es porque cuando todos sepan que los servs existen, y como la cueva influye en el descanso, pero sin la perdida de valiosos servs, entonces ahí, el total de las personas vera la verdad de la medición del tiempo, y todos los mercado que lucran con la medición de horas, minutos, etc, se verían en problemas, porque no estarían preparados para poder medir los servs, y tampoco entenderían el concepto de la cueva, como para poder incluirla en un almanaque o en un reloj de pulsera.
143.758 servs después de que por fin los descubriera, y aprendiera como contarlos correctamente, teniendo en cuenta cuantas veces había pasado por la cueva entre cada ico (periodo entre la salida de la cueva y la nueva entrada a esta. Recuerden que ahora el tiempo me pertenece, y lo puedo llamar y dividir a mi antojo), ahí fue que aparecieron de nuevo estos malditos gorilas que venían a golpearme; Atemorizado e indefenso, no pudiendo oponer mas resistencia que el movimiento violento de mi cuerpo cuando me arrastraban, no pude evitar que me sacaran de la habitación en la que había descubierto el sentido real del tiempo, me llevaron a otro lado, una pieza pequeña, con una mesita en el centro, dos sillas, una muy linda, ocupada por un temible espécimen de la raza humana, la otra medio destartalada, donde me hicieron sentar a mi. Después de varios servs de silencio (137 para ser mas exactos, el temible espécimen, hablo, me grito sin ningún tipo de miramientos, y con suma violencia golpeo la mesa que temblaba ante el peso de su puño. Lo veía mover su boca con furia, como escupiendo las palabras, pero otra vez, solo sentía el estruendo de una multitud, como los abucheos que recibe un arbitro de fútbol en un partido, pasaron 25 servs mas, y otra vez entre en la cueva, casi tan de repente como las otras veces.
Cuando salí de la cueva nuevamente, me di cuenta también, que no recordaba nada de lo que pasaba en el transcurso de mi estancia en la cueva, como que ese momento no existiera, o me estuviese reservado para mas adelante descubrir lo que en la cueva pasaba. Pero esta vez había algo distinto, ya no estaba en la habitación de paredes acolchadas, no, ahora estaba detrás de unas frías rejas de metal gris, con una cama que no parecía tal, en una especie como de celda húmeda y maloliente. La camisa ya no me acompañaba, ahora tenia un mameluco como de mecánico, pero con un numero inscripto en el bolsillo de la parte superior del atuendo.
Me mire las manos, hacia alrededor de 375.012 servs que no las veía (recuerden que las camisas de fuerza son para que las manos le queden atadas a la espalda a uno, porque así no se puede agredir a la gente, ni tampoco se puede hacer daño uno mismo), las vi extrañas, muy lastimadas, como el resto de mi cuerpo. Mientras trataba de razonar en esto, en lo que había pasado, y en el porque de todo esto tan extraño pero interesante a la vez, sentí que la puerta se abría, inmediatamente imagine a los gorilas entrando, pero no, solo me dijeron "tiene 1.568 servs para asearse y para pasear por el patio". Si, la misma cara que estas poniendo ahora, la misma puse yo en ese momento (la cara de asombro, los ojos saltones, las yemas de los dedos unidas en un gesto, como diciendo "QUE DECIS???"). Sin decir mas, salí, me asee y después di una vuelta por el patio, como me habían indicado. Volví a mi nuevo habitáculo, y el guardia me cerro la puerta sin mas tramite. Cuando se retiraba, lo llame, y le pregunte si la sabia de la existencia de los servs, y como se había dado cuenta de eso. Solo me miro y con el dedo índice apoyado sobre su cien, me hizo un gesto que interprete como que me decía que estaba loco.
La cabeza se me lleno de preguntas cuando salí de la cueva, ya hacia 15 icos y 12.365 servs que había descubierto la existencia de los servs y que había empezado a vivir en la verdad de las cosas cuando me vi de golpe sentado en el banquillo de los acusados; cientos de miles de reporteros con sus cámaras apuntando hacia mi; Un abogado que me repudiaba baya uno a saber que cosas (como siempre me pasaba ante la oratoria de los demás, se me nublaba la vista, dejaba de escuchar, y de repente, otra vez a la cueva), comenzó otra vez ese proceso que hasta me daba ya cierto dejo de gracia, porque veía como los demás se esforzaban por llega a algún lado con sus palabras ya inaudibles para mi, y así fue, otra vez a salvo, otra vez en la cueva... ...lo ultimo que escuche ese día repercutió en mi cabeza durante muchos miles de servs luego de la ultima vez que salí de la cueva, "lo condeno a prisión perpetua, por cometer múltiples crímenes, con premeditación y alevosía..." y eso fue todo lo que alcance a escuchar. Daban vueltas en mi cabeza las imágenes, las cosas, y de a poco se empezaron a hilvanar; vi a mi novia muerta en el piso, el departamento en el que vivía ella ensangrentado por todos lados, y en mi mano, el cuchillo con que la había degollado; vi al oficial que me interrogara en el manicomio, también muerto, junto a su ayudante, toda la sala de interrogatorios ensangrentada, y la maciza lámpara, salpicada de sangre en mi mano; y por ultimo, vi al abogado acusador, tan arrogante en sui traje y corbata, pero tan muerto como los anteriores, y la silla, rota y ensangrentada en mi mano, mientras las miradas absortas de los concurrentes a esa sala me pedían piedad.
Hace mucho tiempo, casi tanto que ni me acuerdo, me pregunte el porque de las cosas, como un juego, tratando de esquivar una respuesta a una pregunta comprometedora, mi novia me preguntaba si no pensaba en casarme, en formar una familia, y casi por azar, le tire una pregunta que desde ese DIA, cambio el destino de mi vida, y hasta se transformo en casi una obsesión... ...- No pensaste alguna vez en el porque de estar en este mundo aquí, ahora?, No te preguntaste nunca el porque de que las cosas existan?, Porque el perro ladra y no habla?, Esta visto que nunca se lo había preguntado, y ya no se lo preguntara; después leí en un periódico que mientras mataba a los demás, repetía esas preguntas, y que casi a los gritos hablaba sobre la existencia de los servs y sus derivados; Me llamaron loco y criminal, y ahora estoy pagando lo que para ellos son delitos, me dijeron que iba a estar por el resto de mi vida en prisión, pero ellos no saben que el tiempo no solo que es mío, el tiempo soy yo, por mas que quieran, no podrán detenerme, y vivirán en su océano de minutos y segundos, en la intolerancia de sus días, meses y años, en la falsedad de cumpleaños y aniversarios, pero nunca llegaran a entender ni podrán conocer el secreto de los servs, porque le temen al conocimiento, tanto que encierran a quienes lo tienen, y viven y se regocijan en la mediocridad de su ignorancia. No te dejes llevar por ellos, me gustaría contarte el secreto de los servs, pero para eso, tenes que venir a visitarme, no tengas miedo, solo he matado a aquellos que no quisieron aceptar la verdad, mi verdad, la única verdad...

JULIO TORREALDAY

Texto agregado el 03-11-2009, y leído por 112 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
03-11-2009 Una excelente narración descriptiva. Me gustó leerte. susana-del-rosal
 
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