Buenas noches público presente
Dejen que exprese mi oficio
Soy vendedora de sueños y esperanzas
De ilusiones y realizaciones personales
Llevo a todos sus máximas aspiraciones
Aquello que desean hacer en sus vidas
Aquello que les dará paz en su vejez
Por la alegría del deber cumplido.

Traigo para toda la humanidad
Lo que la humanidad necesita
Médicos, doctores y arquitectos
Policías, ingenieros y poetas
Periodistas, inventores y costureros
Agricultores, pastores y artesanos
Todos, todos alguna vez me vieron
A todos les ofrecí lo que son ahora
A todos les ayude a cumplir sus sueños.

Sin embargo hay tareas duras
Que poca gente tiene el valor de realizar
Personas que pelean con el fuego todo el tiempo
Personas que cuidan enfermos con cariño y humildad
Seres que se internan en las profundidades de la tierra
Seres que dedican sus vidas a Dios
olvidándose de ellos mismos.

Hay una tarea no obstante
Que es muy difícil de asumir
Son pocos los seres valientes
Que adquieren esta misión
Son pocos los seres esforzados
Que toman este sueño
Y viven asumiendo el reto.
Día a día, desafío a desafío

Dejen que les cuente
Dejen que ofrezca este mi producto
Escuchen bien y decidan
Tal vez sea lo que estaban buscando.

Este oficio, mis queridos amigos,
Requiere de mucha paciencia
LA paciencia de un santo
Tendrán que lidiar con niños pequeños
Niños que probablemente estén sucios
Y se ensucien más todavía al aprender
Aquello que ustedes quieran enseñar.
Tendrán que convertir el balbuceo
En palabras de amor, fe y esperanza.

Paciencia para lograr
Que torpes manecitas de niño
Logren escribir aquello
Que el pensamiento recree
Y la imaginación proyecte.

Paciencia para entender
La rebeldía de aquel adolescente
Tal vez incomprendido por sus padres
Tal vez confundido por su entorno
Tal vez desorientado por la vida.

Este oficio requiere de Fe
Fe en la humanidad,
Porque habrá momentos difíciles
Momentos que querrán mandar todo al cuerno
Por la desesperación, la turbación, por el desgano.

Constancia y esperanza siempre
Deben ir con las personas que cumplan esta misión
Para no decaer en el camino
Para continuar con empeño y pujanza
Para seguir confiando en su tarea.
Para no dejar de creer en la humanidad.

Amor, es algo infaltable para este obrero
Con amor habrá de lograr despertar
A los genios que duermen dentro los niños
Con amor habrá de forjar a la nueva gente
Que lidere a este hermoso país
Amor es lo que debe sembrar en los corazones
De aquellos seres que acompañe
Amor al ser humano, a la tierra, a la nación.
Amor a la naturaleza, al trabajo, a sí mismo.

Esta labor, para aquellos que la acepten
Es una labor ingrata, pocos habrán de reconocer y valorar
El trabajo, el sacrificio, la humildad
Al contrario, recibirán desagradables sinsabores
Ataques sin razón, incomprensión de propios y extraños
Y serán culpados por los males de la humanidad.

El obrero que acepte este desafío
Debe saber que no vivirá cómodo
Sus días los pasará en medio del polvo y la tierra del camino,
Atravesará ríos caminando y
Subirá montañas empinadas
Pasará hambre, tal vez frío, tal vez calor
Se enfrentará a la naturaleza
Tal vez en el altiplano, tal vez en la selva.

La persona que acepte este reto
Debe saber que no tendrá una vida placentera
Su familia a veces se verá abandonada
Su tiempo siempre será insuficiente
Su salario no cubrirá sus necesidades
Su trabajo envolverá su vida entera
Su salud se verá quebrantada
Por el polvo de la tiza en pulmones y garganta
Dolores de espalda y pies
Por horas y horas de caminata
De mesa en mesa, de cuaderno a cuaderno
Los ojos, la voz, el oído se irá desgastando
Con el paso de los días y de los años
Cortos descansos, eternos jornales…
Sus penas personales serán solo suyas
Deberán esconderlas y siempre mostrar
Alegría, serenidad, paz

Sí, sé que no suenan muy tentador
Sé que muchos preferirían otras cosas
Sin embargo ahí están los valientes
Que asumen el desafío y toman este trabajo.

Las recompensas no se ven al instante
Serán años de sacrificio
Luego verán a aquellos niños y jóvenes
Convertidos en hombres y mujeres
Haciendo algo por mejorar esta realidad nuestra
Padres y madres de familia enseñando
Aquello que alguna vez les toco aprender de ustedes
Hombres y mujeres forjadores de nuevos presentes
Seres que crean y confíen en el futuro
Seres que promuevan cambios reales en las conciencias, en las sociedades.
Personas valientes, capaces de enfrentar a la vida,
Hombres y mujeres que harán más grande a esta hermosa patria
Hombres y mujeres que en un momento de sus vidas
Valoraran el trabajo sacrificado de aquel que supo enseñarle las letras, los números, la historia, los sueños las esperanzas.

El mejor pago para este oficio, estimados amigos.
Es vivir por siempre en la memoria de aquellos que los escucharon,
Es permanecer presentes en el recuerdo de todos esos niños y jóvenes que conservaron sus palabras para hacerlas vivir.
El mejor pago para este oficio, estimados presentes
Es dejar una huella en la memoria de sus discípulos.
Una dulce huella imborrable.
Es asemejarse al gran Cristo, revolucionario de la historia.

Este oficio, para todos aquellos valientes que acepten es…

La humilde profesión de Maestro Rural…