Espontáneamente ha escrito:

"Puede que yo no sea nada pero de todas formas me entibio con la luz y con el pasto, como si este lugar fuera un pequeño mosaico del bosque entre los mundos. Aquí soy un pájaro más, o quizás algún trasandino sin rumbo fijo, que duerme a la interperie y cobija el azar entre sus ropas llenas de polvo. Me gustaría ser el animal que cruza el desierto con su sangre caliente y los ojos perdidos en un espejismo. Quisiera que la vida no muriera debajo de mí, y que todas las veces el aire sea tibio, fresco y naranjo, como si fuese arcilla clara; como si fuera mi nombre en la arena.

Las crías tienen que ser cuidadas. Las crías tienen que ser llevadas de la mano. Las ventanas están hechas para ser abiertas. Los árboles están destinados a correr. Los helechos son tu corazón frenético. Mi ropa es el lenguaje de los insectos. Así se puede volar zumbando toda la infancia en una imagen".

25.10.09