En mi boca, hoy reseca, se acabaron las palabras. Por eso rujo en el viento para que no me olvides. Soy aire que concentra mis miserias y alegrías. En un espacio del viento entierro mis anhelos. Por las cosas de la vida soy un minuto de mas. Rugido que es un invento para no mirar atrás. Y, entre tus dudas y las mías somos partículas en la vida. Si hubiera tiempo de descuento una esperanza haría una alegría.
Texto agregado el 28-10-2009, y leído por 164 visitantes. (6 votos)