El hombre sin hipocresía
Se despojaba de estigmas
El blanco y el negro
Juntos caminaban
Color esperanza irradiaba
Rehenes del mundo liberados
En parques de diversión
Y ejércitos sin munición
La espina en rosa se convertía
Leña rojiza en labios hidratados
Bella sonrisa provocaba acariciar
Lo vulgar cambió a refinado y ejemplar
El ingenuo, responsable y sagaz
Confiado por lo capáz, invertía
Un tipo ordinario
En sobresaliente y locuaz
Como corolario
Lo imaginario se hacía
Auténtica realidad
Anarquía respetando
Leyes y normas
Y lo olimpico transformado
En terrenal
Sueños que un día espero
Brinden mínima claridad
A la oscuridad en que vivimos..
Texto agregado el 26-10-2009, y leído por 361
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Lectores Opinan
19-11-2012
El sueño de tantos millones.. Pero, desgraciadamente y parafraseando a Calderon de la Barca, toda la vida es un sueño y los sueños sueños son. elpinero
04-12-2009
Sin lugar a dudas el mundo ideal. ¿Qué tendríamos que hacer para que ello sucediera???????? No lo sé, pero creo que con soñar no alcanza. A veces las utopías son muy tristes. louyann