Ya es hora de dormir,
cerrar el cuaderno..
de apresurarse al sueño,
por ser costumbre.
La comitiva de la noche,
con paso lento, lujosa,
avanza, de luna coronada.
por ser invierno.
Y hasta las manos buscan,
siempre dispuestas,
una recua de dudas
por sorprenderla
Ya es hora de dormir
sumando apuestas,
que traviesas recorren
miles de leguas.
Pregúntale al amor,
cuando reposa,
si le moja la lluvia,
como a la hierba.
Y si en su servidumbre,
hierbas y lluvia,
temblando entre las hojas,
de amor se arrullan.
Pregúntale si los sueños
cuando se fugan,
tienen las alas blancas
como las tórtolas.
Y si mi ruego escuchan
allá en el cielo,
cuando lloro mis penas
como la lluvia
Dile que la ternura,
fiel compañera,
como el ave en la rama
en el alma anida
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