TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / YNOTEMAIS / ESOS CABALLOS.

[C:427993]

De repente estamos de regreso.
Es el mismo lugar inconfundible.apenas destruido.
Esas puertas que tragan como monstruos las luces,
el amplio balcon,ahora sombrio
huerfano de arrevoles
vacante de luces,esqueleto yaciente
entre las impolutas murallas,
el polvo palido que trepa la escalera...
las llamas que ardieron sin tregua.


y esos caballos marchando de alcoba a alcoba,
los arcos colgantes,la chimenea ,hundida en la herrumbre,
los espejos rotos,las vigas torcidas.
lo recuerdas? alli bajo la densa ceiba
platicamos,voz de susurros y de sueños,
a lo lejos el rumor del agua cayendo al vacio,
el canto inconfundible de los pajaros,
de pronto se tronchaba un ala,
y de nuevo subiamos a la majestad de un sereno cielo,
tejiamos como avidas manos el complejo telar de nuestras vidas.


Mas.. aveces el agua se fugaba de la orilla,
irremediable surgia el desnudo abismo,
que nos separaba,
y la sal caia a saco petrificando,
y morbida piedra formaba,como calcarea roca
el vuelo de icaro de nuestra utopia,
y de nuevo como sisifo,remontabamos la agreste roca,
con la antorha temeraria entre las manos,
esa luz incendio los cielos
desde el primer dia.


No es momento de apostasias,
no pueden las palabras,callar el mundo que creamos
los girasoles de nuestras candidas y torrenciales primaveras,
Alla estan las estrellas parpadeando
con ellas la larga noche se hace un miraje apenas
que nos toca,el justo y preciso punto
en que te nombro y te creo por la magica palabra,
aveces eras sol restallando en la pupila de mis sueños,
un hondo grito ahogado en el recuerdo,
un temblor de miedos milenarios,
una esperanza rota,como una basija prehispanica
pisada en la busqueda,en la vigilia infinita,
un desierto de arenas cambiantes y salobres
el agreste cansancio de los hombros,
las llagas en las manos,el titanico trabajo,
una manta rodante,que detubiera el frio,
una nueva cuna de angustias y esperanzas,
un amanecer radiante de sueños
cayendo como un nuevo diluvio
que bañaba mi alma y mis huesos.


Alla el pasto creciendo,inexorable
irrevocable abarcando el confin imnonmbrable
el tiempo que perezoso avanza
como si esperara algo inaudito
el martillar acompasado de los fragiles segundos,
el canto de los monjes,los pies que se arrastran,
un paraiso escondido que atisba
desde el fondo del mundo,nuestras manos que tocan,
el ojo vaga impreciso entre las rosas,coronadas de espinas,
las flores mutiladas,primaveras segadas,
junto a las botas militares abandonadas,
un angel que cruza pensativo,
con la luz apagada de sus ojos
una luz que vino del principio
del ignoto y remoto ayer
antes del cafe de la mañana
y de pronto otra vez el campo se oscurece,
de nuevo la lluvia pertinaz y el fogonazo del relampago.



Como saber si somos los mismos de ayer?
si el jardin esta sin flores,
despojos de carabanas,diseminados en kilometros,
si fuimos los primeros jamas lo sabremos,
hay huellas de otros pasos en el sendero,
el universo nos trae voces envueltas
en el sacro misterio del comienzo del tiempo,
hay una puerta inmensa que se abre
alla en la esquina,la puerta angosta,
una corriente fria,cala los huesos,
y regresa como reconociendo apenas el paisaje,
los gosnes se quejan,cuando el viento sopla,
se oyen pasos que se alejan,la estrecha puerta bivra.


como saber en cual de ellas
el avido porvenir camina,
y no la regresion remota?
Ahora el ancho cielo iluminado,cabe en las cuencas de mi mano,
de los arboles,las rojas frutas se ofrecen,
y en el infinito mar, los peces tambien esperan
he lanzado mis redes,una y otra vez
y el espejo de agua flota suspendido
en las primeras llamas,del comienzo del tiempo,
de nuevo lanzo las semillas,la piedra prehistorica,
rodea en circulos los pequeños lagos,
que reflejan el ritmo del hombre,la matriz del tiempo,
el ayer que se disuelve,las espadas rotas,
los gritos moribundos,los niños llorando por el pan,
los cuerpos insepultos,el aleteo de las moscas,
y en el borde del tiempo,mis manos que te buscan como ayer,
nuestro fuego de besos,que afirma el amor,
alguien da una cobija al mendigo,
alguien deguella a un hombre justo,que no se rindio..

No hay duda que es el mismo lugar,escucho el agua
cayendo infinita hacia el fondo del abismo.

Texto agregado el 24-10-2009, y leído por 90 visitantes. (0 votos)


Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]