No me llames, no ves acaso que muero?
busco en la penumbra y en la luz una respuesta,
caminos sin salida, barrancos oscuros.
no me llames, déja que me vaya.
Dejame en silencio, sin decir palabras
que bailen en mi oido, que alegren mi alma,
deja que la noche me llene despacio
con la soledad que antes me buscaba.
No me avives la vida, ni pintes con colores
la poca calma que me está quedando,
llévate de aqui tus versos de novela,
dejame dormir y amanecer conmigo.
Yo no soy la ola, que te lleva a la orilla
ni flor que alegre tu jardin precioso,
soy solo la arena que absorbe la espuma
y que espera inerte la otra marea.
No me pidas nada, no me digas ama,
deja que la vida pase ligera,
dame este respiro ante tu quimera,
guardate el deseo, ya no lo quiero.
No me llames mas, no me necesites
cuida tus jardines, dejame en la arena
yo soy siempre roca, fria pero fuerte
no me invadas ya, el alma cansada.
Ahora quiero ser el viento , el sol
que mece la vela, que calienta la voz
ya se ha enfriado, el alma espranza,
con falsas canciones, sin furia en los besos.
Mirame despacio, cuando cierres los ojos
te regalo los ensueños que tuviste conmigo
no puedo quedarme en tu bosque perfecto
prefiero perderme en el mar solitaria. |